Política

El PP tilda de «caos» la sanidad pública y augura un mal 2018

La oposición considera a Puig «cómplice de la chapuza» de la gestión de la consellera Montón

La consellera Carmen Montón, el pasado mes de noviembre, cuando presentó el actual proyecto de presupuestos
La consellera Carmen Montón, el pasado mes de noviembre, cuando presentó el actual proyecto de presupuestoslarazon

La oposición considera a Puig «cómplice de la chapuza» de la gestión de la consellera Montón

Un «régimen castrista e impositorio, sin libertad para elegir». Así calificó ayer el diputado del Partido Popular Juan José Zaplana la sanidad valenciana. Lo hizo en una rueda de prensa ofrecida en Les Corts para valorar el año 2017 y pronosticar cómo será 2018 en materia de sanidad.

El popular enumeró todas y cada una de las faltas y carencias que la Conselleria de Sanidad ha perpetrado durante los últimos 12 meses: el crecimiento de las listas de espera, la falta de sustituciones, los cierres de centros de salud o la falta de participación y relación con sindicatos, asociaciones de pacientes y escuelas universitarias. «Solo se reúnen con quien piensa igual», señaló.

También recordó la existencia de centros que han sufrido inundaciones por aguas fecales en los últimos meses, así como los diversos casos de legionela, que suscitaron debate en pleno sin explicación alguna por parte de la consellera, la directora General de Salud Pública o el presidente de la Generalitat.

«Carmen Montón no tiene ni idea de gestionar», aseguró Zaplana. Se apoyó en el colapso en urgencias que se vivió en Navidad del año pasado, en fallas, en verano o en las recientes vacaciones navideñas para corroborar tal sentencia. También destacó que los dos grandes decretos sanitarios que Montón promovió en 2017 (la sanidad universal y el copago farmacéutico) fueron «tumbados» por el Tribunal Constitucional, además de la causa de las facturas del Hospital Provincial de Castellón, que ella misma denunció y terminó archivada.

Para acabar de resumir el año, trató uno de los temas más polémicos del año referentes a la sanidad valenciana: el IVO. «Ya no se sabe si el contrato es válido», indicó. Invitó, además, al presidente Puig a denunciar ante la Fiscalía las irregularidades del Hospital General de Valencia (127 millones en facturas sin control y 14 contratos a dedo).

De cara al año entrante, diagnosticó cinco grandes retos a resolver: el nuevo mapa sanitario que pretende diseñar Montón (con creación de áreas supradepartamentales), el proyecto sin fecha de la Fe de Campanar, la gestión de grandes contratos que terminan este mismo año (entre ellos, el del Hospital de la Ribera), el problema del transporte sanitario de médicos de urgencia (que dejará de funcionar la semana que viene) y las listas de espera. El martes pasado, Montón y Puig se comprometieron a rebajar de 120 a 100 los días de espera. Zaplana consideró «una trampa» esta promesa. Se trata solo de las listas quirúrgicas y no de las diagnósticas. Según el diputado, al paralizar y colapsar las listas de diagnóstico previas a la operación, es «imposible que se saturen las listas quirúrgicas». Ignacio Subías, del PSPV, exigió a Zaplana que evidenciara esas «trampas» o se disculpase públicamente.