La Generalitat prohíbe construir en 15 millones de m2 en l’Horta

El nuevo Plan de Acción Territorial y Dinamización (PAT) de l’Horta de Valencia, que se aprobará mañana en el pleno del Consell, preservará más de 11.000 hectáreas de suelos agrícolas y recuperará cerca de 250 hectáreas de huerta y más de cien edificaciones tradicionales. En total, el proyecto de la Generalitat permitirá que se desclasifiquen quince millones de metros cuadrados de huerta en los que ya no se podrá construir.

Con ello, el Gobierno valenciano quiere evitar «cualquier expectativa urbanística especulativa sobre estos suelos que pasarán a ser no urbanizables», según explicó ayer la consellera de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, María José Salvador.

La Ley 5/2018 de la Huerta de Valencia también prevé la creación del Consell de l’Horta de Valencia y la elaboración de un Plan de desarrollo agrario, que actualmente está en fase de elaboración y que abordará la formación, la profesionalización y la mejora de la viabilidad y rentabilidad de las explotaciones agrarias.

Patrimonio cultural

Salvador aclaró que la protección del suelo de huerta no significa que los municipios de l’Horta «queden fosilizados en sus crecimientos urbanísticos», ya que el PAT determina, a través de las zonas rurales comunes, unas áreas de crecimiento racional y sostenible de borde urbano donde los municipios podrán concretar sus demandas de usos residenciales, o de ampliaciones de polígonos.

Por lo que respecta a la recuperación de 54 enclaves (250 hectáreas y más de 100 edificaciones tradicionales) la consellera considera que suponen el fin de una política urbanística. A partir de ahora, «tolerancia cero a más destrucción de huerta».

El Plan de Acción Territorial y Dinamización también fomentará la implantación racional de actividades terciarias compatibles con el trabajo agrícola y estimulará la rehabilitación del patrimonio cultural de la huerta, con más de mil elementos catalogados, muchos en mal estado de conservación.

Asimismo, se recoge un ambicioso plan de uso público (itinerarios por la huerta, vías verdes, museos, investigación, experiencias didácticas, etc.) «que mejorarán la calidad de vida de los ciudadanos y generarán recursos económicos».

Tiempos de «pelotazo»

La consellera advirtió de que «no podemos volver a modelos pasados que han producido despilfarro de recursos, desvertebración del territorio, paro y precariedad, huida de talentos e hipotecas sobre el territorio y las arcas públicas».

Del mismo modo se pronunció la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, quien destacó que se inicia «una nueva etapa para Valencia y los pueblos que conforman la huerta, un nuevo camino que nos aleja de la especulación y la predación del territorio, que nos aleja de los tiempos oscuros de los 'pelotazos' y que pone en valor los usos agrícolas del suelo como un bien a proteger, como un espacio de contención de la urbanización desaforada, como un bien necesario para la vida».