Comunitat Valenciana

La juez de Erial reconoce que obtuvo la mayoría de pruebas con Zaplana preso

La magistrada espera que las comisiones rogatorias aporten nuevos indicios y por ello prorroga el secreto del sumario sin dar más datos sobre la investigación

Eduardo Zaplana, en una imagen de archivo
Eduardo Zaplana, en una imagen de archivolarazon

La juez que instruye la causa contra el expresidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, reconoce en el auto en el que prorroga el secreto del sumario, que «la mayoría de las diligencias de investigación» se materializaron cuando «fueron practicadas las detenciones precisas para garantizar la investigación».

De este modo, se podría llegar a pensar que las detenciones en la causa Erial fueron en parte «prospectivas» a la espera de ver lo que salía de todo aquello, según el tenor literal de lo que afirma la juez en su auto.

Este auto de la juez arroja la sombra de la duda sobre los indicios que obran en la causa y que nutren un sumario extenso sobre el que se basaba, hasta la fecha, la detención de Eduardo Zaplana y el resto de miembros principales de la presunta trama. Tanto Zaplana como su dos presuntos colaboradores Francisco Grau y Joaquín Barceló pasaron más de treinta semana en prisión.

Ahora, en un auto fechado el 20 de septiembre, la jueza admite que la mayoría de las pruebas se consiguieron después de estar los tres sospechosos en prisión, lo cual ha hecho a las defensas de los mismos preguntarse en virtud de qué indicios se les confinó en prisión.

Además, el citado auto de la jueza señala que la prórroga actual al secreto del sumario se sustancia en las comisiones rogatorias internacionales que se han cursado y que, al parecer, aún no han dado todos sus resultados.

La juez también hace referencia a la «ingente documentación recibida y que exige un análisis exhaustivo que está derivando a su vez en la práctica de diligencias de investigación, que de ser conocidas por las partes, podrían resultar infructuosas».

También hace relación la juez a todos los indicios que han sido recabados y que están pendientes de análisis, y que la publicidad de los mismos podría malograrlos en este punto del proceso.