Impuestos

Montoro regala a Fabra 247 millones al no exigirle la tasa de Patrimonio

Juan Carlos Moragues (en el centro), con su equipo, antes de presentar el proyecto de Presupuestos 2014
Juan Carlos Moragues (en el centro), con su equipo, antes de presentar el proyecto de Presupuestos 2014larazon

La Comunitat Valenciana se embolsará 247 millones de euros entre este año y el que viene gracias al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, quien ha decidido que las Comunidades Autónomas no entreguen al Estado lo que recaudan en concepto de Impuesto de Patrimonio. Esta tasa fue recuperada el año pasado por el Consell, puesto que estaba bonificada.

En 2013, primer año de su cobro, la recaudación de esta tasa resultó sorprendente, ya que, aunque se esperaba ingresar una cifra en torno a los 70 millones de euros, la cantidad final fue de 117 millones de euros.

Para 2014, el Departamento dirigido por Juan Carlos Moragues ha previsto en las cuentas de la Generalitat valenciana ganar 130 millones de euros por este impuesto, unas ganancias que serán enteramente para la región y que, sumadas a los 117 de este año, equivalen a los 247 antes comentados.

De todas formas, es de esperar que la cifra finalmente sea superior, visto el comportamiento del impuesto durante este ejercicio.

Por lo que respecta a las previsiones del resto de ingresos tributarios, en el de Sucesiones y Donaciones se espera también un incremento del diez por ciento, al pasar de 172,4 millones de euros a 189,8 millones.

El de Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados sube también un 14,5 por ciento. Sin embargo, la tasa sobre el juego no funciona tan bien, puesto que desciende un 33,4 por ciento (se reduce de 13,9 a 9,2 millones de euros), al igual que los impuestos medioambientales -que también fueron creados el año pasado. La recaudación de esta tasa pasa de 30,2 millones a 21.

En este mismo capítulo, el de los ingresos no financieros, es donde descansa también la nueva tasa creada este año por el Consell y anunciada recientemente por Moragues. Se trata del impuesto sobre depósitos bancarios que afectará a las entidades financieras, no a los depositantes.

Como era de esperar, la medida no ha agradado en absoluto a los bancos. El conseller de Hacienda, que destaca por su carácter conciliador, tiene previsto reunirse con ellos durante este semana y la que viene, de forma individual, para acercar posturas.

Pero, por el momento, en los Presupuestos de la Generalitat ya hay 230 millones de euros previstos para el año que viene procedentes de este impuesto, así que, sólo queda esperar que no recurran este impuesto ante los Tribunales y lo desembolsen.

El conseller ya explicó que en ningún caso esta tasa deberá ser devengada por el usuario del banco y, de hecho, recalcó que en el caso de que así sucediera, el cliente está amparado por la Ley y debe comunicarlo al Banco de España.

Este impuesto ha sido introducido por el PP en la Ley de Acompañamiento vía enmienda ya que no sabían si finalmente lo podrían instaurar.