Cae una banda de albaneses con más de cien atracos en domicilios

Los tres detenidos, ya en prisión provisional, entraban en chalets de noche mientras los propietarios dormían y se llevaban joyas y tecnología.

Son tres delincuentes de entre 30 y 31 años y se dedicaban, básicamente, al robo de viviendas mientras los propietarios dormían pero no llegaban a agredirles. El Grupo de Delincuencia Organizada de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid ha desarticulado una banda de ciudadanos albaneses especializada en el robo de viviendas unifamiliares y a los que se les acusa de al menos un centenar de atracos en Madrid, León, Sevilla y Cádiz. Según informó el Instituto Armado en un comunicado, los tres arrestados en el dispositivo, con edades comprendidas entre 30 y 31 años y que ya están en prisión provisional, tenían como modus operandi principal el robo en las viviendas pro la noche con los propietarios en su interior, lo que en el argot policial se conoce como «murcigleros». Además, podían a cometer varios atracos en una misma noche. La investigación operación «Habitat Berat» se inició el pasado verano, tras conocerse la existencia de varios robos en horario nocturno y mientras los propietarios de la vivienda estaban durmiendo en diferentes urbanizaciones de la región.

A partir de este momento, los investigadores iniciaron un estudio de los hechos denunciados y establecieron vigilancias en las zonas, que permitieron identificar a tres ciudadanos de origen albanés sobre los que se centraron todas las investigaciones. Para cometer los robos, previamente analizaban posibles viviendas candidatas para conocer las medidas de seguridad. Una vez seleccionado su objetivo sustraían un vehículo con el que se trasladarían a cometer el robo. A la vivienda accedían mediante escalo hasta la primera planta, sorteando los sistemas de alarma instalados y forzando alguna de las ventanas o puertas existentes de la misma, para luego acceder al interior dos de los tres integrantes, quedando el último encargado de dar seguridad y de emprender la huída al volante del vehículo. Se movían por la vivienda de una manera tan sigilosa que los propietarios no llegaban a enterarse hasta la mañana siguiente. Su objetivo principal eran piezas de joyería, telefonía, tablets, pequeños electrodomésticos, cámaras fotográficas, dinero y documentación personal. Una de las características de este grupo era que no dudaban en embestir vehículos policiales en caso de verse sorprendidos y conduciendo de forma temeraria. Los tres detenidos estaban plenamente asentados en San Fernando de Henares y Arganda del Rey. En el momento de las detenciones,fueron intervenidos dos vehículos, material informático y electrónico, joyas, así como herramientas que utilizaban para forzar las puertas y ventanas.