Medio Ambiente

Carmena sentencia a la incineradora: cierre en 2025

Prevé reducir al 50% los residuos quemados en 2022 como paso previo a la clausura.

El vertedero de Valdemingómez tendrá que soportar alrededor de 200.000 toneladas más de basura
El vertedero de Valdemingómez tendrá que soportar alrededor de 200.000 toneladas más de basuralarazon

Prevé reducir al 50% los residuos quemados en 2022 como paso previo a la clausura.

El equipo de Gobierno de Manuela Carmena quiere acabar con la incineración de residuos para 2025. En esa fecha pretenden cerrar la incineradora de Valdemingómez y los restos que no hayan conseguido reciclar se desecharán en un vertedero. Para lograrlo, la delegada de Medio Ambiente y Movilidad, Inés Sabanés, presentó ayer la Estrategia de Prevención y Gestión de Residuos 2018-2022, que busca iniciar el camino a la desaparición de la incineradora reduciendo en cuatro años los residuos que procese en un 50 por ciento.

El objetivo de la estrategia, que ahora inicia un periodo de información y participación pública hasta su aprobación inicial en Junta de Gobierno, es alcanzar un modelo de economía circular y residuos cero del que forma parte la recogida del 100% de los residuos orgánicos para particulares y empresa que ya avanzó la semana pasada con la ampliación de los distritos con obligación de reciclar en el nuevo cubo marrón. «Este año es un punto de inflexión para mejorar en las cantidades recicladas gracias a nuevas medidas, como la creación de los puntos limpios de proximidad o el refuerzo de la recogida selectiva en zonas comerciales», señaló Sabanés.

Es por ello que se pondrán en marcha más iniciativas para fomentar el reciclaje y la reutilización. Por ejemplo, se promocionará el compostaje comunitario y el autocompostaje de los residuos orgánicos; la reutilización y recuperación de ropa y textil potenciando la recogida a domicilio a través del 010 y aumentando los puntos de recogida; se transformarán los puntos limpios para asegurar la reutilización de los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, así como otros residuos susceptibles de potenciar la economía circular, entre otras medidas.

Impacto de olores

El plan de residuos, que supondrá una inversión de 1.554 millones hasta 2022, contempla una «importante transformación» del Centro Tecnológico de Valdemingómez, cuya importancia destacó la delegada de Medio Ambiente, para que mejore las tasas de recuperación de materiales, el tratamiento del 100% de los residuos, la reducción hasta la eliminación de la incineración, hasta lograr que sólo haya un 35% de vertidos en 2020 y un mejor aprovechamiento de los recursos recuperados como el biogas, a la vez que mitigue de manera significativa el impacto de olores.

Al respecto, Inés Sabanés recordó que llevan tres años trabajando para la reducción del mal olor procedente de la planta de procesado de residuos, si bien reconoció que «no estamos en la situación que quisiéramos aunque estamos haciendo un gran esfuerzo». De hecho, señaló que se está avanzando en la aplicación de protocolos para identificar los focos en función del aumento de las denuncias en determinadas situaciones atmosféricas.