El 98% de los coches que entran a la capital, sin plaza «disuasoria»

La medida de Carmena que más incidencia prevé tener en la reducción de emisiones apenas contará con aparcamiento para 9.570 de los 450.000 vehículos que acceden a diario a Madrid.

Los altos níveles de dióxido de nitrógeno obligaron al Ayuntamiento de Madrid a aplicar el protocolo anticontaminación en la noche del jueves. La entrada en vigor del Escenario 1 de este plan –que implica limitaciones de velocidad en los accesos– antes de que acabe septiembre y el pronóstico de un otoño más cálido de lo normal hacen prever un tercer trimestre complicado en lo que tiene que ver con la calidad del aire en la ciudad pero también con la gestión del tráfico. De persistir estos valores de NO2, el consistorio tendrá que aplicar los siguientes escenarios previstos en el protocolo, que en la práctica suponen la prohibición de aparcar en la zona reservada al estacionamiento regulado –las zonas verdes y azules del SER– a los no residentes y la prohibición de circular a la mitad de los vehículos en función del número de su matrícula.

Una de las medidas incorporadas al Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático aprobado por el Gobierno de Manuela Carmena (Ahora Madrid) que más incidencia pretende tener en la reducción de las emisiones de dióxido de nitrógeno es la construcción de una red de aparcamientos disuasorios conectados con el transporte público con el objetivo de lograr una reducción en la entrada del vehículo privado hasta el centro de la ciudad. La red proyectada por el consistorio consta de 12 de estos aparcamientos. Sin embargo, y pese a econtrarnos ya en mitad de la legislatura, el Ejecutivo municipal no ha abierto aún ninguna de estas instalaciones.

Será este mes de octubre cuando se inaugure el primero, en concreto, el situado en el entorno del estadio Metropolitano, en la avenida de Arcentales (San Blas). En los días en los que el Atlético de Madrid juegue en su campo, este aparcamiento estará reservado a los socios del club de fútbol. Cuando no haya fútbol, este parking será disuasorio y contará con 1.500 plazas. A ellas hay que sumar las 1.300 que suman los aparcamientos de la avenida de Portugal y de Nuestra Señora del Recuerdo. Las otras 8.000 plazas prometidas por el Ayuntamiento y recogida en el Plan A para disuadir a los conductores tendrán que seguir esperando.

Precisamente el retraso en la puesta en marcha de esta red de aparcamientos fue criticado ayer por la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de la capital, Purificación Causapié: «Madrid necesita plazas de aparcamiento en las afueras para evitar que los coches entren en la ciudad y para que supongan una posibilidad de dejar el automóvil privado en las afueras cada día», señaló la edil del grupo socialista, que además insistió en la falta de «capacidad de gestión» que demuestra el equipo de Ahora Madrid en esta materia.

Desde el Ayuntamiento precisan que estos aparcamientos proyectados se llevarán a cabo, los primeros de ellos en 2018, aunque sin concretar más las fechas. En total, la red de 12 parkings disuasorios prevista en el Plan A plantea dotar a la corona metropolitana con 9.570 plazas. Según el calendario de implantación de estos aparcamientos con el que el trabaja el Ayuntamiento, la red estará acabada en 2020. Cuando en ese momento esté a pleno rendimiento, sólo servirá como alternativa para un porcentaje muy pequeño de los vehículos que cada día entran en la ciudad. Según los datos del último Plan de Movilidad Urbana de Madrid, son 450.000 los coches que entran en la capital de media cada día. Esto implica que la red de aparcamientos disuasorios sólo tendrá capacidad para un 2% del total.

Hasta tres plantas

Además del ya construido en el entorno del Wanda Metropolitano –levantado sin coste para las arcas públicas–, la red municipal prevé otros once emplazamientos: Pitis y Paco deLucía (Fuencarral-El Pardo), Fuente de la Mora (Hortaleza), Valdebebas (Barajas), Canillejas (Hortaleza), Santa Eugenia (Villa de Vallecas), San Cristóbal, Villaverde Alto y Villaverde Bajo Cruce (Villaverde), Aviación Española y Colonia Jardín (Latina). Se construirán en superficie o en altura de hasta tres plantas –excepto aquellos que estén en el entorno de zonas verdes– y estarán a una distancia máxima de 200 hasta el acceso del transporte público. El Gobierno municipal prevé asimismo que el uso de estos aparcamientos sea gratuito para quienes tengan un abono o un título de transporte o un mínimo coste en caso excepcional, desde los 50 céntimos. La limitación de estancia en estos aparcamientos establece un mínimo de 2-4 horas y un máximo de entre 16 a 24 horas.