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Los propietarios devolverán las fianzas a los inquilinos

La Razón
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Los propietarios del edifico del número 1 de la calle Amalia se reunieron ayer con varios de los inquilinos para informarles de que la aseguradora del inmueble, Generali Seguros, no cubría los gastos del desplome ni se hará cargo de la consecuencias económicas del siniestro. Por ello, ofrecieron a los afectados la devolución de la fianza por cada una de las viviendas alquiladas, –unos 600 euros– de modo que así quedarían extintos los contratos de arrendamiento correspondientes. Además, los propietarios asumirán los gastos de alojamiento y desayuno de los inquilinos desde el próximo martes, cuando termina la ayuda de emergencia proporcionada por el Ayuntamiento de Madrid, hasta el 31 de agosto. Sin embargo, esta propuesta no convenció a los vecinos que la tildaron de «insuficiente» ya que reclamaban una vivienda, por lo que se negaron a firmar el acuerdo.

Por su parte, la concejala de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras se reunió ayer con los vecinos para acudir junto a ellos al solar en el que se han depositados todos los escombros recogidos del derrumbe pero las lluvias de la pasada madrugada desaconsejaron la búsqueda entre los restos por lo que aplazaron la recuperación para otro día. En el caso de los inquilinos de la letra C cuyas viviendas están aún en pie, el consistorio organizará la semana que viene la forma en la que los afectados puedan recoger sus enseres para que previsiblemente el martes reclamen todas sus cosas. Asimismo, la edil explicó que será la propiedad del inmueble quien se ocupe de su alojamiento a partir del martes para todos aquellos con contrato de arrendamiento. En el caso de los realquilados, tendrán que buscar otra alternativa por su cuenta. Con todo, la junta de distrito de Tetuán ya ha asignado citas para el lunes y el martes para todos los vecinos de la calle Amalia número 1 con los trabajadores sociales para resolver las incidencias que puedan tener al respecto. Para ello, miembros del Samur Social se acercaron ayer por la mañana al hotel en el que se encuentran alojados los inquilinos y les pidieron que enviasen un escrito con sus necesidades para acelerar los trámites con los servicios sociales. Igualmente, conminaron a empadronarse en el edificio a quienes no lo habían hecho todavía para facilitar la burocracia necesaria en estos casos.