Comunidad de Madrid

Plan de rescate para parados de larga duración

Plan de rescate para parados de larga duración
Plan de rescate para parados de larga duraciónlarazon

Reducir la cifra de 547.701 parados registrados en la Comunidad de Madrid es la gran obsesión del Ejecutivo regional. «Seguiremos peleando por ello», aseguró Ignacio González en el Debate sobre el Estado de la Región del pasado septiembre. Una pelea en la que se antojan necesarios «planes de choque» como el que ayer presentó la consejera Ana Isabel Mariño. La medida anunciada significará la subvención por parte de las arcas autonómicas de hasta 3.000 contratos formativos para desempleados de larga duración.

La iniciativa busca reactivar la contratación precisamente entre aquellos que más tiempo llevan aguardando una oportunidad laboral. Los beneficiarios tendrán que acreditar que llevan más de un año de paro y que han agotado toda clase de prestación. Serán contratados tanto por empresas privadas como por ayuntamientos, fundaciones o entidades sin ánimo de lucro siempre que su centro de trabajo esté en la Comunidad. Para poder ser beneficiarias de la medida, las empresas candidatas tendrán que solicitar la ayuda, mientras que serán las oficinas de empleo las que seleccionen a los posibles trabajadores para cada puesto a partir del perfil esbozado por el empleador. A partir de esos candidatos, serán las empresas las que tomen la decisión final a la hora de contratar. Los parados de larga duración que pasen estos filtros tendrán jornadas de trabajo que no excederán las ocho horas al día, de las que el 25% serán dedicadas a contenido formativo y el 75% restante al desempeño del trabajo profesional. Los contratos formativos deberán ser formalizados antes de que finalice el presente año. Al margen de que estos contratos son compatibles con las desgravaciones fiscales y con la bonficación en el pago de las cuotas de la Seguridad Social, otro de los atractivos principales para las empresas o entidades públicas que decidan sumarse a la medida radica en el hecho de que los pagos los realizará la Comunidad por adelantado.

Contrato de 6 meses

La partida presupuestaria destinada a sufragar estos contratos –cargada a las cuentas de 2013– será de 10 millones de euros. El objetivo es que ese montante cubra 3.000 contratos de hasta 1.800 euros al mes. Los beneficiarios percibirán entre 1.613 y 967 euros en función de su nivel de cotización. Ello supone salarios hasta 2,5 veces superiores al mínimo interprofesional. La Comunidad busca que estas personas que llevan un tiempo sin estar en contacto con el mercado laboral encuentren aquí una oportunidad no sólo profesional, sino también para formarse. Mariño recalcó a este respecto que espera que este plan de choque «sea muy bien recibido» y se mostró segura de que contribuirá a dar una salida «a todas las personas que no cobran subsidios». Si las empresas están contentas con el rendimiento de los trabajadores podrán renovar el contrato formativo, una vez finalicen los seis meses, cuyo coste íntegro sufragará la Comunidad.

Mariño también destacó ayer además de que los beneficiarios serán parados de larga duración, podrán ser personas que cobren del programa Prepara –plan de recualificación profesional de las personas que agoten su protección por desempleo– o de la Renta Mínima de Inserción. Asimismo, tendrán prioridad aquellos que tengan a su cargo hijos menores de dieciséis años o aquellos que siendo mayores de esa edad tengan alguna discapacidad.

El anuncio de Mariño fue bien recibido tanto en el mundo sindical como entre los empresarios. El secretario general de Comisiones Obreras de Madrid, Jaime Cedrún, destacó que el plan es una de las propuestas del «Plan de choque para la protección de las personas y de fomento del empleo» redactado por los sindicatos. «La idea nos vale, a la espera de que mejore la financiación», valoró Cedrún. Por su parte, la secretaria de Relaciones Laborales y Formación de UGT de Madrid, Isabel Vilabella, valoró, en declaraciones a Europa Press, la medida como «muy positiva», aunque, a su juicio, «se queda corta, haría falta más presupuesto». Desde CEIM, el plan fue valorado también postivamente: «Todas las medidas que fomenten la contratación y contribuyan a favorecer el descenso de las cifras del paro deben ser bien recibidas». La medida, según adelantó la consejera, será llevada en breve al Consejo de Gobierno y se incorporará al plan global por el empleo que arrancó en marzo. En este contexto ya han sido puestas en marcha propuestas como ayudas directas a la contratación, la formación con prácticas remuneradas, los acuerdos con entidades bancarias o la cesión de locales «low cost» para emprendedores.