Madrid

Rechazo a los carriles bici de Carmena

Las asociaciones ciclistas critican los tres primeros proyectos licitados para los nuevos itinerarios y exigen su retirada. Los carriles bidireccionales, la multiplicación de los ángulos muertos y la reducción del ancho de seguridad, principales reproches

Carriles bidireccionales para bicicletas
Carriles bidireccionales para bicicletaslarazon

Las asociaciones ciclistas critican los tres primeros proyectos licitados para los nuevos itinerarios y exigen su retirada. Los carriles bidireccionales, la multiplicación de los ángulos muertos y la reducción del ancho de seguridad, principales reproches

La pasada semana, el área de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento de la capital publicó los primeros tres contratos para la construcción de nuevos itinerarios ciclistas, que permitirán –junto a los otros cinco contratos que aún no se han licitado– al Gobierno de Carmena cumplir su promesa de aumentar en 2017 en 30 kilómetros la superficie dedicada a los amantes de las dos ruedas. Una iniciativa que, sin embargo, apenas cinco días después de hacerse públicos sus detalles, ha recibido duras críticas de los propios ciclistas. Las asociación Madrid Ciclista y el blog En Bici por Madrid exigieron ayer la paralización de estos tres proyectos «que, de ejecutarse, pondrían seriamente en peligro a los ciclistas». También solicitan que la alcaldesa depure las responsabilidades políticas por haber permitido «la publicación de unos proyectos que carecen de la calidad mínima exigible».

Hasta el momento, el área de Urbanismo ha publicado en el Perfil del Contratante de la web municipal tres contratos: el primero, para la instalación de carriles bici en en el Paseo Moret-Pintor Rosales, la Puerta de Toledo-Antonio Leyva y la avenida Oporto-Eugenia de Montijo; el segundo, que afectará a las calles Santa Engracia y Bravo Murillo, así como a los Bulevares y la prolongación del de Madrid Río de Aniceto Marinas a Puente de los Franceses; y el último, vertebrado en la avenida de los Toreros y la Gran Vía de Hortaleza.

Las asociaciones ciclistas contrarias a estos proyectos no sólo lamentan la falta de transparencia que el cosistorio ha demostrado en su gestación sino que entran con detalle en sus reproches. Subrayan en un comunicado que el Ejecutivo de Ahora Madrid haya desempolvado «diseños obsoletos que ya no se usan en ningún país europeo, que han sido públicamente ridiculizados por promotores holandeses y daneses de visita en España» y que, además, «están causando un goteo de víctimas mortales en ciudades como Barcelona».

Pero, ¿qué propuestas plantea el Gobierno de Carmena que chocan con la visión de los amantes de la bicicleta? La que califican como la «innovación más delirante e incomprensible» es la instalación de nuevos carriles bicis incrustados entre el carril bus y el tráfico rodado general. La idea, según Madrid Ciclista, multiplicará «los conflictos» al atrapar al ciclista «en el peor punto imaginable de la calle sin ninguna capacidad de maniobrar para evitar encontronazos».

En lo que afecta a los diseños proyectados por el Ayuntamiento para los nuevos carriles en los Bulevares, Santa Engracia y la avenida de Oporto, los firmantes del comunicado han detectado 34 nuevas situaciones de peligro para el ciclista que «en la actualidad no existen». Otras críticas tienen que ver con la reducción del ancho de seguridad, actualmente situado en el metro y medio, pero que con los nuevos contratos se vería reducido hasta los 70 centímetros. En la documentación de los nuevos contratos también se incluye la instalación de múltiples carriles bidireccionales. La experiencia de Barcelona demuestra que estas vías de doble dirección para los ciclistas están detrás de numerosos accidentes, también con los peatones, que se ven obligados a mirar hacia ambos lados antes de cruzar este carril. No en vano, estos carriles bidireccionales proyectados cruzan hasta 27 pasos de peatones.

Asimismo, lamentan que el Gobierno de Carmena «elimine sin ninguna explicación ciclocarriles», como por ejemplo los de Santa Engracia. Carlos Enjuto, de Madrid Ciclista, destaca que precisamente estos ciclocarriles –los carriles compartidos por bicicletas y coches, con limitación a 30 kilómetros por hora– «han funcionado al haber mejorado extraordinariamente la convivencia en los últimos tres años». A todas estas críticas suman otras, como que los carriles sitúan «a los usuarios en los ángulos muertos de los coches» o «imposibilitan el giro natural de los ciclistas». Por todo ello, las asociaciones no descartan acudir a vías judiciales en el caso de que las licitaciones sigan adelante.

Nuevos peligros para las bicis

Conflicto con el autobús

El proyecto contempla cómo el carril bici y el carril bus están separados en la calle Carranza (izquierda), pero en el interior de la glorieta de Bilbao ambos se transforman en un solo carril para volver a bifurcarse posteriormente. Una solución que puede provocar conflictos sobre la preferencia o en el caso de que la bicicleta quiera girar en la glorieta

Carriles bici entre el autobús y el tráfico.

Una de las principales críticas de las asociaciones ciclistas es la instalación de nuevos carriles para bicicletas (en rojo) entre los dedicados a los autobuses y los utilizados por el resto del tráfico: «El ciclista quedará atrapado en el peor punto imaginable de la calle, sin ninguna capacidad de maniobrar para evitar encontronazos». En la imagen, la solución planteada por el Ayuntamiento para las calles Blasco de Garay y Alonso Martínez.

Carriles bidireccionales para bicicletas

Otra de las nuevas soluciones del Gobierno de Carmena es la instalación de carriles de dos direcciones para los ciclistas. Estos diseños, según las asociaciones, reducen el ancho mínimo de seguridad. Además, multiplicarán el peligro para los viandantes ya que cruzan hasta 27 pasos de peatones. En la imagen, la propuesta para la instalación de un carril bidireccional (en rojo) en la calle Santa Engracia.