Semana Santa de Pasión en Torrelaguna

Este Viernes Santo, la Hermandad del Cristo del Perdón estrena nueva cruz en su paso del Misterio

La Antigua Hermandad del Santísimo Sacramento y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo del Perdón , volverá a realizar por décimo año consecutivo su Estación de Penitencia este Viernes Santo en la Villa de Torrelaguna. Sus anderos portaran sobre sus hombros el misterio del Calvario al completo compuesto por el Cristo del Perdón, su madre la Virgen del Rosario al pie de la cruz y San Juan Evangelista. Al paso le precederá un cortejo de Nazarenos que portarán las insignias más significativas que posee la hermandad, como el libro de reglas, o el estandarte bacalao, entre otras. Este año también le acompañará un grupo de monaguillos, vinculados a la Parroquia de Santa María Magdalena.

Como novedad dentro de la joven hermandad, este año el paso del misterio estrena una nueva cruz para su sagrado titular, Jesucristo crucificado. La cruz ha sido confeccionada por el maestro imaginero andaluz, Sr. D. José Daniel Henares Paredes -el mismo escultor que realizó las imágenes titulares de la hermandad- y fue bendecida en la Solemne Función Principal de Instituto, el 3 de marzo, por el Excmo, y Rvdmo. D. Juan Antonio Reig Pla, Obispo Compltense. Un acto litúrgico en el que también estuvo presente el capellán espiritual de la hermandad y Párroco del pueblo Rvdo. Sr. D. Iván Bermejo Jiménez. La nueva cruz tiene 3,60 metros de altura y está tallada en madera de cedro real, cuyos nudos realizados a mano, son realzados en oro bruñido con piedra de ágata de 24 kilates.

El recorrido de la Estación de Penitencia será el ya habitual. La cruz de guía saldrá de la iglesia de Santa María Magdalena a las siete y media de la tarde. Posteriormente, atravesará la calle de las Monjas, pasará por la Plaza de Montalbán, girando hacia la calle Malacuera y la calle Mayor. Pasará por la plaza Juan Menendez Campillo y por la calle de la cava, la calle Cardenal Cisneros, la plaza del pueblo, la calle de la Estrella, la plaza Juan de Mena y entrará por la plaza Mayor hasta recogerse en la iglesia de Santa María Magdalena. La hermandad saldrá acompañada como en años anteriores por la Asociación Cultural y Musical Fuentidueña del Tajo.

Al término de la Estación de Penitencia, tendrá lugar a las 10:30h la procesión del Silencio, acompañando a las imágenes de Nuestro Señor Jesús Yacente y Nuestra Señora de la Soledad. Asímismo, el domingo de resurrección acontecerá la procesión del encuentro de la virgen de la Soledad con el Santo Niño, (que será portado por un grupo de pequeños jóvenes cofrades) en la plaza de Torrelaguna.

Durante todo este mes, precedente de la Semana Santa, la Junta de Gobierno del Cristo del Perdón -renovada a finales de 2015- ha preparado todo un ciclo de actividades “cofrades” con el fin de evangelizar entre loS fieles de la lcoaldiad. Entre ellos destacan una visita a Valladolid y Medina de Ríoseco, la segunda edición del “Concierto Cofrade”, protagonizado por la Agrupación musical Ciudad de Móstoles, Agrupación musical Morata de Tajuña y la Banda de Música Munciipal de Daganzo. El viernes de Dolores, el ya acostumbrado Via Crucis y Besapié al sagrado titular de la Hermandad en la Iglesia Parroquial. También, el pasado sábado, Torrelaguna dio el pistoletazo de salida para inaugurar la Semana Santa con el ya tradicional pregón, organizado junto a la Hermandad de la Soledad, patrona de la Villa. En esta ocasión fue el maestro imaginero de la Hermandad del Cristo del Perdón el que ofreció su sincero y emotivo discurso, acompañado musicalmente por la Banda de Música de Fuentidueña de Tajo (Madrid). Ya dentro de la Semana Santa, el martes, por primera vez en 50 años la imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo, atado a la columna procesionó por las calles de Torrelaguna, realizando un ejercicio de Viacrucis. La Hermandad de San Sebastián mártir custodia la imagen en su Ermita, y gracias a la iniciativa y esfuerzo del párroco de Torrelaguna y a la junta de hermandades de la villa, esta imagen vuelve ahora a ser partícipe de la Semana Santa en el madrileño pueblo.