Una consulta popular para remodelar la Plaza de España

El consistorio madrileño ha decidido dar marcha atrás en su proyecto inicial de convocar un concurso de ideas para reformar la plaza de España y pone en manos de los madrileños el nuevo diseño del entorno. Según explicó ayer en la comisión de Urbanismo, la coordinadora general de la Oficina de Planificación Urbanística, Beatriz Lobón, el Ayuntamiento promoverá una consulta entre ciudadanos y profesionales para que escojan entre las propuestas que planteará el área de Urbanismo de cara a reformar la Plaza de España.

Serán los técnicos municipales quienes diseñen una serie de propuestas para presentar a los ciudadanos a finales de año. Con todo, Lobón detalló que la consulta se abrirá a profesionales de otros países para que puedan aportar sus ideas sobre la nueva plaza. Con todas ellas, el área que dirige Paz González elaborará una propuesta concreta que se prevé estará lista en esta legislatura.

El objetivo de la remodelación es «modernizar» la Plaza de España, o lo que es lo mismo: peatonalizar parte del entorno, ensanchar aceras, renovar el arbolado y ampliarlo, entre otras cosas.

El proyecto para darle un nuevo aire al entorno de la plaza no es nuevo. Fue el ex alacalde Alberto Ruiz-Gallardón quien, en 2011, tras remodelar el entorno de Madrid Río, quiso que el eje que une dos de las calles más comerciales y transitadas de la ciudad –Princesa y Gran Vía– se conviertiera en «un gran pulmón verde» complementario con los jardines Sabatini, el templo de Debod y el propio Madrid-Río.

La idea de Gallardón era esperar a que finalizara la concesión del aparcamiento subterráneo (en 2015) y sacarlo de nuevo a concurso con nuevas concesiones que permitieran la autofinanciación de la superficie, como se llevó a cabo en la calle Serrano. Con cinco años por delante hasta que acabara el contrato de explotación del parking, Gallardón decidió convocar un concurso de ideas a nivel nacinal e internacional para remodelar la plaza.

Probablemente ha sido la coyuntura actual lo que ha llevado ahora al consistorio que dirige Ana Botella a proponer una fórmula más económica y participativa para los madrileños, ya que podrán votar entre distintas propuestas realizadas por técnicos municipales y proponer modificaciones sobre la que sea elegida por votación popular. El objetivo es que los diferentes proyectos estén presentados antes de que acabe el año para llevar a cabo la consulta popular en 2014 y adjudicar el proyecto en 2015, momento en el que finaliza la actual concesión del aparcamiento subterráneo.