Continúa la «oleada» de pateras a la costa con casi 600 inmigrantes en cuatro días

El delegado del Gobierno apunta a un «efecto llamada» por haber liberado a casi doscientos

El incesante despliegue de pateras llegadas a las costas de la Región durante el fin de semana desde Argelia continuó ayer con el rescate de otros 48 inmigrantes a bordo de cuatro embarcaciones, lo que ascendió a 567 las personas atendidas por Salvamento Marítimo en apenas cuatro días. Así, con la colaboración de la patrullera Río Guadalentín, de la Guardia Civil, se les pudo dar asistencia sanitaria, mientras que el delegado del Gobierno en la Región, Francisco Bernabé, informó de que 518 personas habían sido internadas en Comisarías de la Comunidad y en el pabellón Basterreche, puesto a disposición por la alcaldesa de Cartagena, Ana Belén Castejón.

Asimismo, a cerca de 200 inmigrantes ya se les tramitaron los correspondientes expedientes de expulsión en los siete Juzgados habilitados para esta tarea en Cartagena, Murcia, Molina de Segura y Lorca. Por ello, el presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Miguel Pasqual de Riquelme, comunicó al delegado que la previsión de los órganos judiciales es que quedaran resueltos todos los expedientes a lo largo del día de ayer.

Por su parte, Bernabé, tras reunirse con el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, desveló que la oleada de pateras que vivió la costa de la Región hace tres semanas, con la llegada de otros 280 inmigrantes en 27 embarcaciones «obligó a dejar a algunos libres porque no había ningún tipo de previsión, y porque carecíamos de los medios suficientes para atender a todos el mundo. Esto pudo provocar un efecto llamada registrado este fin de semana».

El delegado del Gobierno explicó que tras mantener diversas conversaciones con los servicios de inteligencia y de información del Estado, todos han coincidido en que lo que pasó hace tres semanas es lo que ha motivado el desembarco de este fin de semana. Así, inquirido sobre quién tomó la decisión de dejar en libertad a esas personas, Bernabé señaló que él no estaba en el cargo en ese momento, «por lo que no voy a elucubrar sobre cosas que desconozco».

Al mismo tiempo, desveló que la última oleada de inmigrantes estaba compuesta por hasta un centenar de pateras, aunque la mitad de ellas desistieron y decidieron volver a la costa de Argelia, «gracias al dispositivo habilitado por parte de todos los efectivos del Estado, que interceptó a las primeras 49 en alta mar».

Posteriormente, Bernabé se reunió con la presidenta de la Asamblea Regional, Rosa Peñalver, quien le dio la «enhorabuena» a él y a los integrantes del operativo por el «trabajo tan extraordinario» que han realizado ante la llegada masiva de inmigrantes, al tiempo que consideró «digna de felicitación» la coordinación mostrada por todas las administraciones.

Por su parte, siete juzgados de Murcia autorizaron el traslado a un centro de Archidona, en Málaga, de «la mayor parte» de los inmigrantes. Según informó el Ministerio del Interior, que no concretó la cifra, se trata de una medida de carácter «temporal y extraordinaria ante la imposibilidad» de alojarles en los centros existentes en la zona, como el Centro de Internamiento de Sangonera la Verde.