Sevilla

Un cartel sensual y pleno de detalles para anunciar la Semana Santa

Gregorio Serrano, Nuria Barrera, José Luis García-Palacios y Carlos Bourrelier, ante la obra
Gregorio Serrano, Nuria Barrera, José Luis García-Palacios y Carlos Bourrelier, ante la obralarazon

Los ritos y los tiempos son elementos fundamentales para conocer de qué va esto que en Sevilla gusta llamar «mundo de las hermandades». El pasado otoño, se conocieron los nombres de los encargados de pronunciar el pregón y de realizar el cartel de la Semana Santa de 2013. A Francisco Javier Segura le toca escribir qué es lo que espera la ciudad el Domingo de Pasión en el teatro de la Maestranza, y a Nuria Barrera mostrar en el cartel las denominadas «esencias» de la fiesta. La cita, como es habitual desde hace tres años, era en la sede de la Caja Rural del Sur, donde su presidente, José Luis García-Palacios, recordó que este acto se le debe a Adolfo Arenas, quien trató, mientras estuvo al frente de la Junta Superior, de dignificar y modernizar los anquilosados mecanismos de San Gregorio.

Entre los asistentes estaba un nutrido grupo de hermanos de la Macarena, a la que pertenece la pintora, que esperaban ansiosos un cartel dedicado a la Esperanza. No fue así y tras retirar el obligatorio damasco apareció un cartel compuesto por varios elementos relacionados con la Semana Santa y rematados por la palabra Sevilla. Se trata de su «particular pregón», que lo va a dar por toda España y en el extranjero mediante un discurso basado en los sentidos, ya que se ha representado una corneta de la Centuria, que evoca los sonidos de la Semana Santa; la «luz y la alegría», del palio de la Paz saliendo en los inicios del Domingo de Ramos; la sed de los costaleros, del búcaro representado; un canasto de diputado de tramo de la Amargura, para representar el orden de la celebración; la naveta de la Mortaja, donde se guarda el incienso; el azahar, de una jarra de la Concepción del Silencio; una medalla de la Macarena y un cirial del Cachorro, cuya cera, la «i» de la palabra Sevilla, representa la fe de los cofrades.

Todo ello se apoya en una representación de las andas de la Soledad de San Lorenzo, aseverando de esta manera que es el Sábado Santo cuando de verdad termina la Semana Santa de Sevilla.