Medioambiente
‘Reconcilia España’, una escucha activa de las voces de nuestro territorio que piden un pacto por el cuidado del medioambiente
El pasado 27 de noviembre se celebró en la Casa de América este encuentro que reunió a profesionales de la agricultura y la pesca, técnicos ambientales, políticos y ciudadanía para poner en común ideas y reflexionar sobre la diversidad de nuestro territorio y escuchar aquellas voces que lo sostienen
En los últimos tiempos , estamos más expuestos a fenómenos meteorológicos extremos y adversos: desde sequías que se prolongan en el tiempo a inundaciones cada vez más frecuentes, pasando por temporales como Filomena o la DANA de Valencia, España es uno de los países más expuestos a este tipo de riesgos.
Así lo muestran las cifras. 2025 ha sido, de hecho, el peor año en décadas en materia de incendios, con 382.607 hectáreas calcinadas en 228 fuegos -la mayor superficie quemada desde 1994. El último verano que hemos vivido ha sido el más cálido de la serie histórica y los climas áridos ya ocupan más del 20 % del territorio nacional.
Todo esto deja de manifiesto que el momento de actuar es ahora. Por ello, y con el fin de acercar al debate público las diferentes realidades que conviven en nuestro territorio y apuntar las posibles soluciones para un patrimonio natural y medioambiental en plena metamorfosis, el pasado 27 de noviembre tuvo lugar el foro ‘Reconcilia España’ en la Casa de América de Madrid.
Durante la apertura, Javier Dorado, director ejecutivo de Legados, resumió el papel de la organización casi como quien comparte una preocupación íntima: “Ser puente. No venimos a sustituir a nadie, sino a conectar. Queremos que estos relatos, estas urgencias y estas soluciones lleguen a donde se toman las decisiones. Y queremos hacerlo de manera estable, rigurosa y honesta”. Su intervención funcionó como una brújula discreta durante toda la jornada, ordenando los testimonios que se iban sucediendo en la sala.
Esta jornada sirvió como punto de encuentro en el que representantes públicos, empresarios, expertos, ciudadanía y, en general, las diferentes voces que componen los diferentes sectores de nuestra economía, pudieron intercambiar impresiones y dar espacio al diálogo y al análisis.
Tras la celebración del Foro se encuentra Legados, organización dedicada a fomentar la participación de la sociedad civil en la construcción de soluciones para los desafíos climáticos a los que se enfrenta el país en todos sus territorios. Legados contó con la colaboración de Alianza Rural, Fundación Independiente y otras entidades aliadas que representan la pluralidad de los territorios españoles.
En palabras de Dorado, “había una necesidad evidente: dar voz a quienes cuidan y sostienen este país cada día, a quienes han construido legados que hoy se ven amenazados. Para encontrar soluciones reales, hay que hacer las cosas de abajo arriba, construyendo desde el territorio y desde la ciencia para que todas las voces sean verdaderas protagonistas del futuro de nuestro país. ‘Reconcilia España’ nace precisamente para que esas voces formen parte de las decisiones que marcarán nuestro mañana”.
Una nueva forma de entender el país
El encuentro estuvo estructurado en 4 partes -Conocer, Conservar, Construir y Hacerlo posible- y contó con la presencia y el testimonio de algunas figuras de gran interés, como por ejemplo, Odile Rodríguez de la Fuente, bióloga y científica, además de hija del gran divulgador televisivo.
Tal como describió esta experta, “vivimos desconectados de la naturaleza y del mundo rural que son nuestro cordón umbilical con la identidad y la vida. El 99,9% de todas las especies que han existido se han extinguido y hoy solo nos acompaña el 1%, una realidad que debería recordarnos nuestra fragilidad. Reconciliar exige comunicación clara, diálogo con el territorio y soluciones de abajo arriba. No se trata de aleccionar, sino de ofrecer a las personas, especialmente a los jóvenes, la oportunidad de reencontrarse con la naturaleza como un espacio de bienestar y sentido”.
“La naturaleza también es memoria. Mi padre me enseñó que la conservación es una forma de amor. La naturaleza es un hilo que teje identidad, cultura y futuro. Por lo tanto, conservar no es detener el tiempo, es honrar lo que nos sostiene. No podemos excluir a quienes viven la naturaleza cada día”, añadió.
También fue invitado Borja Cardelús, como representante de una familia muy vinculada a algunos de los hitos de conservación más relevantes de España. Su padre, como recordó en el foro, fue una figura clave en frenar proyectos que habrían destruido espacios como Doñana. “Todo empieza por la responsabilidad personal” apuntó, antes de alertar sobre la burocracia y la ideologización que hoy frenan la protección del territorio. Para él, el país necesita recuperar aquella valentía política que permitió salvar para siempre los espacios que hoy consideramos esenciales.
Ester Muñoz, portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, desde su punto de vista institucional, llamó a que la política escuche directamente a quienes sostienen el territorio y transforme sus demandas en decisiones útiles y realistas. Muñoz señaló el valor de foros como este, ya que nos permiten conocer de primera mano el impacto de las políticas públicas en la vida de las familias y desde diferentes sectores de la sociedad.
Asimismo, tuvo lugar una charla entre María Rey, presidenta de la Asociación de la Prensa de Madrid y conductora del encuentro, e Iván Espinosa de los Monteros, presidente de Atenea. En este intercambio, se destacó el papel de la sociedad civil y la necesidad de construir marcos estables que reduzcan trabas, aporten certidumbre y permitan que el territorio prospere. Ambos participantes abordaron además cómo reforzar la colaboración entre instituciones, organizaciones y ciudadanía para avanzar hacia soluciones que respondan a las necesidades reales del país.
Otras voces fueron las de Álvaro Vara, alcalde de Gajanejos, un pequeño municipio de 50 habitantes, quien reflexionó sobre los desafíos de preservar el entorno en la España rural, o la de José Carlos Caballero, viticultor, que describió de qué manera los cambios climáticos y las políticas ambientales están afectando al cultivo de la vid. Lucía Pardal, técnica ambiental en A Bola, presentó el proyecto del bosque comestible, un modelo de sostenibilidad que busca integrar comunidad y naturaleza. José Luis Belmonte, representante de la Iniciativa Legislativa Popular sobre una nueva Ley de Aguas, analizó cómo la participación ciudadana puede contribuir a mejorar la gestión del agua frente a fenómenos de sequía e inundaciones. Por último, Tatiana Sánchez, ganadera de Bravo para Guadalest, puso de relieve los retos que enfrentan los productores rurales ante el deterioro del entorno y las políticas vigentes.
Esa escucha activa es, precisamente, la misión de Legados. Dorado lo explicó así en conversación con este periódico: “Nuestro trabajo es llevar estas voces a la agenda pública, y lo hacemos con un criterio claro: el territorio no es un lugar del pasado, es el pilar del futuro. Y cuando un país se desconecta de su territorio, pierde no solo identidad, sino inteligencia colectiva”.
Además, la ciudadanía también pudo expresarse en ‘Reconcilia España’, aportando una muestra representativa de las demandas de la población rural y urbana. En este bloque los asistentes coincidieron en reclamar menos burocracia, más apoyo efectivo y una escucha activa de quienes habitan los territorios. Muchos subrayaron que viven y trabajan en primera línea del territorio y que conocen de primera mano qué soluciones funcionan y cuáles no.
“No pedimos privilegios; pedimos ser escuchados”, expresaron varios participantes.
Mirando hacia el futuro
Las conclusiones del foro coincidieron en que la política debe escuchar antes de legislar, que la conservación del entorno no es una ideología sino un compromiso compartido y que las ideas expuestas en espacios como este deben llegar al Congreso para traducirse en políticas públicas.
Esa reflexión no sólo se escuchó en el escenario: también se palpó en la sala. Esa sensación de impacto se notó en el público, donde agricultores agradecían sentirse por fin reconocidos; jóvenes preguntaban por oportunidades para volver a sus pueblos; y asistentes recordaban que “la naturaleza también es memoria”. El foro dejó la impresión de un país que, pese a las dificultades, conserva una enorme capacidad de reconstrucción cuando se miran las cosas con honestidad y desde la experiencia real de la gente que sostiene el territorio.
“España está viva, pero desconectada”, compartió Dorado. De ahí el valor de foro como este, puesto que “la política avanza por un lado y el territorio por otro. Aquí hemos escuchado relatos que rara vez llegan al Congreso o a los grandes debates nacionales. Sin ellos, legislar es como escribir con los ojos cerrados”.
Por eso, el trabajo del foro no termina en esta jornada. Legados publicará un manifiesto, unas conclusiones y una hoja de ruta que recogerá todas las aportaciones realizadas. “No será un documento para guardar en un cajón —afirmó Dorado—. Vamos a organizar espacios de diálogo por todo el país. Queremos que estas voces lleguen a los Parlamentos, a los Ministerios y a los medios. Estamos construyendo un proyecto que se mide no solo en ideas, sino en impacto”.
También se remarcó la necesidad de integrar tradición y sostenibilidad en las estrategias ambientales y la importancia de reconectar con el territorio para comprender mejor sus necesidades.
Con todo lo anterior, ‘Reconcilia España’ no solo fue un lugar para el análisis y la recopilación de experiencias, sino que, con su voluntad de foro transformador, también diseñó una hoja de ruta.
Como contó Javier Dorado, “la hoja de ruta que hemos comenzado a construir hoy demuestra que las soluciones solo pueden nacer del territorio, del conocimiento y de la escucha real. 'Reconcilia España' es un espacio independiente, al servicio de la ciudadanía, para poner estos legados a disposición de todos y avanzar hacia un país más justo y en armonía con sus territorios”.
El espíritu de la jornada quedó resumido en una idea: España necesita reconciliar sus ritmos, su conocimiento y su memoria. Para lograrlo, debe integrar tradición y sostenibilidad, ciencia y experiencia, políticas públicas y vida cotidiana. Y hacerlo desde la escucha. “'Reconcilia España' es un espacio independiente, al servicio de la ciudadanía —concluyó Dorado—. Queremos poner estos legados al servicio de todos y avanzar hacia un país más justo y más enraizado”. Quizá un país se recomponga así: reuniendo a quienes lo sostienen, dando valor a su testimonio y construyendo desde lo pequeño hacia lo grande.