Solidaridad

Julia, del Comedor Social de Humanes: “Atendemos a 43 familias más desde el confinamiento"

Julia Blanco junto a 30 voluntarios más atienden desde hace diez años a familias vulnerables y personas mayores necesitadas. Desde el inicio del estado de alarma han aumentado las familias que han perdido sus ingresos

Comedor Parroquial de Cáritas
Comedor Parroquial de CáritasLa Razón

Desde hace ya cerca de 10 años Julia Blanco Salgado y un equipo de 30 voluntarios comienzan cada a las 7,30 a trabajar hasta al mediodía para organizar la gran tarea que tienen a diario: las comidas y el reparto de alimentos.

Por este comedor parroquial de Cáritas de Humanes, se atiende de lunes a sábado a 600 personas al mes, los que suponen cerca de 230 familias que reciben todos los meses un paquete de entre 40 a 50 kilos de alimentos no perecederos. Estas provisiones son complementadas cada semana con alimentos frescos, como embutidos y frutas y verduras, en entregas que se hacen tres días por semana.

Atienden a persona de todo origen y condición, incluidas personas mayores que viven solas y no pueden cocinar, a las que les hacen la comida.

43 nuevas familias

Las personas que atienden, o bien no tienen recursos, o bien han sido derivadas por Asuntos Sociales ya que tienen ingresos que, como aclara Julia, son muy escasos y no les llega para la comida si tienen que pagar el alquiler y los recibos.

Pero desde que comenzó el estado de alarma, Julia detalla a LA RAZÓN, cómo se ha incrementado el número de personas que solicitan ayuda al haber perdido sus fuentes de ingreso. Uno de éstos casos es el de las personas que trabajaban como empleadas del hogar, que bien por miedo al contagio o porque trabajaban de forma irregular, ya no pueden acudir a las casas a hacer su trabajo.

Julia cree que esta situación tardará en mejorar, porque aunque algunos usuarios de este recurso social recuperarán su medio de subsistencia otros muchos lo van a tener muy complicado.

Comedor cerrado

Otra de las dificultades que les han surgido a este equipo de voluntarios, es que se han visto a cerrar el comedor, por lo que se han organizado para entregar la comida diaria en envases para llevar.

También preparan comidas a unas 40 personas que acuden de lunes a sábado, para llevarse la comida previamente envasada en un táper. Además del desayuno, que también se ha visto interrumpido, por lo que les entregan pan, leche, zumo y embutidos, aunque los que acuden a desayunar son menos, puntualiza Julia.

Apoyo de varias empresas

Sin la desinteresada labor diaria de la treintena de voluntarios, este comedor parroquial de Humanes sería inviable y sería imposible sin el apoyo de varias empresas. Aunque se abastecen del Banco de Alimentos de Cáritas Parroquial y otros organismos cuentan con el apoyo de empresas locales, que les entregan embutidos, o incluso otras, que desde Griñón les facilitan productos cárnicos. Pero Julia ha querido destacar también la colaboración y soporte que les brinda la Fundación laCaixa, que les presta ayuda para, por ejemplo, pagar la luz o la gasolina de las dos furgonetas con las que hacen su labor.

Si quieres colaborar con un donativo te facilitamos la siguiente cuenta bancaria:
CaixaBank
Titular: Comedor Social de Humanes de Madrid
Número: ES76 2100 2947 3802 0008 3120