Sol

El plan de Ayuso para dejar atrás el «shock» de la guerra interna

Alineada con Feijóo en la nueva etapa que afronta el PP, la presidenta buscará consolidar su liderazgo orgánico en Madrid y apuntalar su gestión de cara a las urnas de 2023

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Diaz Ayuso asiste al partido del Campeonato de Europa XV masculino de rurgby que España y Rumanía disputan en el Estadio Central de la UCM de Madrid .
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Diaz Ayuso asiste al partido del Campeonato de Europa XV masculino de rurgby que España y Rumanía disputan en el Estadio Central de la UCM de Madrid .Comunidad de MadridComunidad de Madrid

Tras la sacudida que ha supuesto la crisis interna abierta en el Partido Popular, uno de los primeros mensajes que quiso lanzar la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso –al margen de las explicaciones que ofreció en torno al contrato para la compra de mascarillas por el que su hermano percibió unos honorarios de 55.000 euros–, tuvo que ver con su decidida voluntad de que la actividad y la agenda del Gobierno regional no se vieran afectadas. Tanto la presidenta como su equipo son conscientes de que, en una legislatura exprés como la actual, inaugurada hace unos meses, con su victoria el 4-M, y ante el horizonte electoral que suponen las elecciones autonómicas de mayo de 2023, cualquier error o despiste puede alejar el objetivo fijado por Sol. Que no es otro que el de la mayoría absoluta.

Antes que su tercera cita con las urnas como candidata en apenas cuatro años, Ayuso afrontará antes del próximo verano el Congreso Regional en el que el PP de Madrid deberá renovar su dirección. Ella ya ha dejado claro que concurrirá como candidata y, tal y como ha constatado este diario entre las distintas sensibilidad del partido en la región, nada parece indicar que vaya a tener rival. En este terreno se concretará una de sus prioridades. La propia Ayuso ha insistido en ello cada vez que se le ha preguntado: llevar a toda la formación en Madrid la ilusión que se sustanció en las elecciones del 4 de mayo y devolver la normalidad a la organización dando el relevo a la gestora liderada en estos momentos por Pío García Escudero y Ana Camíns y al resto de gestoras nombradas en estos años en decenas de municipios de la comunidad y de distritos de la capital.

Al margen de la consolidación de su liderazgo en el terreno orgánico en Madrid, Ayuso también está llamada a desempeñar un papel relevante a nivel nacional como punto de apoyo a Alberto Núñez Feijóo, señalado por todos para suceder a Pablo Casado. En estas últimas dos semanas, tal y como señalan fuentes próximas a la presidenta madrileña, ella ha estado en permanente contacto con Feijóo, con Alfonso Fernández Mañueco y con Juanma Moreno Bonilla para consensuar una posición común. Ayer mismo, antes del comienzo del partido de Rugby España-Rumanía al que acudió en la capital, Ayuso dejó clara su posición respecto al futuro del PP: «Feijóo va a contar con todo mi apoyo y ayuda. No se sabe si hay más candidaturas o no al Congreso Extraordinario, pero la suya es en todo caso la mejor y vamos a seguir colaborando con el PP en todo lo que necesite». A juicio de la presidenta madrileña, los populares afrontan ahora «una situación de análisis interno, de qué queremos ahora para el futuro, para España y para el PP». Y, una vez más, volvió a descartarse como eventual candidata a ese Congreso Extraordinario: «Sí, se descarta, no ha habido una pugna por alcanzar un liderazgo. Siempre lo he dicho: mi sitio es Madrid, tengo una gran responsabilidad con los madrileños y lo que quiero es que lleguemos a 2023 unidos, fuertes y ser un contrapeso a las políticas que está lastrando a nuestro país». E insistió en su lealtad al proyecto que representa el Partido Popular: «En la Comunidad voy a seguir haciendo nuestro trabajo, nosotros tenemos un proyecto que de izquierda a derecha está ilusionando a todos los ciudadanos basado en la prosperidad y en la libertad. Vamos a seguir trabajando de la misma manera, pero siendo absolutamente colaboradores y leales a la organización».

Natalidad y salud mental

En lo que tiene que ver con su gestión en Madrid, los planes de Ayuso se mantienen inalterables: acelerar el cumplimiento del programa electoral con el que se presentó a las elecciones del pasado mes de mayo; mantener el pulso al Gobierno de Pedro Sánchez en todos los frentes y, muy especialmente, en lo que concierne a la amenaza esbozada recurrentemente desde Moncloa para aprobar una armonización fiscal que suponga una subida de impuestos a los madrileños por la puerta de atrás; intensificación de su agenda internacional para tratar de atraer a Madrid inversiones y abrirse a nuevos mercados; consolidación de la recuperación económica en un momento en el que la incertidumbre por la guerra desatada por Rusia pone en riesgo el terreno que la mejora de la situación sanitaria ligada al control de la pandemia había allanado. En paralelo, también tendrán continuidad algunos de los proyectos que la presidenta ha fijado como prioritarios como el ambicioso plan de natalidad presentado en enero y el desarrollo de una estrategia integral para la mejora de los protocolos de atención en materia de salud mental, cuyas líneas prioritarias serán presentadas hoy.

Pendientes de la Fiscalía

En paralelo a esta estrategia discurrirá la investigación que ha iniciado la Fiscalía Anticorrupción en torno al contrato adjudicado desde el Servicio Madrileño de Salud (Sermas) a la empresa Priviet Sportive. Tras anunciar la apertura de las primeras diligencias, el escrito del fiscal dejó claro que, de momento, no encuentra «indicios delictivos» en la actuación de la presidenta. Vinculado a todo ello, la presidenta también tendrá que hacer frente a la ofensiva de Más Madrid, PSOE y Podemos alrededor de esta misma polémica.