Empresas

Los workplaces flexibles, una tendencia que crece en Madrid

La empresa Lexington cuenta con casi 15.000 metros cuadrados entre la capital y Barcelona

Uno de los espacios gestionados por Lexington
Uno de los espacios gestionados por LexingtonLa Razón

Los espacios de trabajo actuales han roto con los del pasado. De la rigidez y la disciplina de antaño se ha pasado a la flexibilidad y a la informalidad. La pandemia, y las nuevas rutinas laborales que ha traído consigo, no ha hecho sino acentuar esta tendencia. “Durante los primeros meses de la crisis sanitaria, la incertidumbre por el presente y el futuro más cercano afectó a la estabilidad de prácticamente todos los sectores, y por supuesto, aquellos vinculados a espacios de trabajo fuimos unos de los más golpeados. Pero la realidad es que, justo en este tiempo afloró más que nunca la necesidad por parte de las empresas de contar con un modelo de oficina que les aportara flexibilidad, que redujera la duración de sus compromisos contractuales y que les permitiera aumentar o disminuir el espacio alquilado en función de las necesidades de la plantilla. Esta situación aceleró de nuevo el crecimiento del sector flex, el cual ya estaba consolidado antes de la pandemia y venía creciendo a dos dígitos”, afirma David Vega Sánchez, CEO de Lexington, operador de espacios de trabajo flexible.

En el caso de esta empresa, inauguró su primera ubicación en el año 1981 en el número 141 del Paseo de la Castellana, siendo pioneros en España en la comercialización de este tipo de modelo flexible. Actualmente, cuentan con casi 15.000m2 repartidos entre Madrid y Barcelona, y más de 600 empresas, en su mayoría de carácter internacional. Se trata de un concepto importado de EE UU. “El hecho de contar con una oficina de manera inmediata, sin asumir los gastos de implantación ni de personal de recepción o mantenimiento, así como la facilidad para adaptarse a las necesidades concretas de cada momento, fueron las principales motivaciones para considerar que esta fórmula realmente suponía una clara ventaja para las empresas y sus equipos en nuestro país”, señala el CEO.

En el caso de la capital, “es el centro neurálgico de los negocios en nuestro país, donde todo pasa, y donde las oportunidades de expansión y de generación de sinergias aumentan notablemente. Ubicar nuestros espacios flexibles mayoritariamente en Madrid significa ofrecer a nuestros clientes la posibilidad de localizar sus negocios en áreas estratégicas, potenciando así su visibilidad de marca, sus conexiones con cualquier parte del mundo y la captación del mejor talento”, explica Vega.

En lo que se refiere al perfil de empresa que más demanda estos espacios, son las relacionadas con software, ingeniería, fintech, salud, energía o cloud computing. “Por otro lado, se trata de empresas con una fuerte vinculación tecnológica y para las cuales factores como la identidad de marca, la sostenibilidad y el bienestar de los empleados son fundamentales”, añaden desde Lexington. Asimismo, cada vez se empiezan a atender más demandas de empresas que precisan servicios de oficina gestionada: “Es una modalidad que permite a las compañías disponer de sus propias oficinas pero 100% gestionados y con todo el soporte de un operador de espacios de trabajo de nuestra experiencia”.

Ahora, con la pandemia, y la consecuente combinación de teletrabajo y trabajo presencial, “se están optimizando el espacio y los recursos invertidos. Hemos promovido también servicios dirigidos a la deslocalización de equipos y alternativas 100% flexibles como el alquiler de oficinas privadas por horas. Todo ello nos ha permitido cubrir las demandas de nuestro target y contar a día de hoy con una ocupación media que supera el 85% en nuestras ubicaciones”.