Ola de calor: Madrid estudia instalar toldos en el intercambiador provisional de la A-5

El Ayuntamiento de Madrid va a revisar la posible instalación de marquesinas o la instalación de alguna estructura que permita aliviar las esperas de los viajeros en el intercambiador de Cuatro Vientos, ha anunciado el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, en la comisión del ramo.

Ha sido la respuesta al ruego presentado por el concejal de Vox Ignacio Ansaldo, con el que ha reclamado "urgentemente alguna estructura para dotar a la zona de sombra" y con el fin de evitar golpes de calor o insolaciones.

"Ahí se juntan 25 líneas de autobuses, entre urbanos e interurbanos, y miles de usuarios a diario. La escasez de marquesinas para asumir este crecimiento del tráfico en el intercambiador ha hecho que durante el invierno y la primavera los usuarios hayan tenido que sufrir las lluvias durante sus esperas para coger el autobús, algunas de hasta 30 minutos, y ahora con la llegada del verano y las altas temperaturas que sufre Madrid, acompañadas con el efecto multiplicador del asfalto, ha provocado situaciones de alta tensión entre los usuarios e incluso con los conductores de la EMT al tener que hacer uso de los baños al terminar su recorrido pues no dejan entrar al autobús mientras van al baño", ha descrito el edil de Vox.

Ansaldo ha explicado que no están pidiendo al área que instalen marquesinas refrescantes como las instaladas en Pavones y Villaverde pero sí, al menos, "que se ponga una estructura de toldos o carpas a lo largo de los dos sentidos de la A-5". "En menos de un mes podrían estar instaladas. Su sombra reduciría al mínimo los conflictos y los usuarios podrían esperar los autobuses sin golpes de calor o insolaciones", ha defendido.

Vox, por último, ha planteado la ampliación del número de baños portátiles, fuentes de agua y dotar las instalaciones de bancos para que los viajeros puedan sentarse mientras esperan.

Carabante ha tomado nota del ruego asegurando que estudiarán la viabilidad de incorporar esas estructuras o ampliar las marquesinas para aliviar las esperas tanto de usuarios como de trabajadores. "Unas 20.000 personas están utilizando estos servicios especiales en un plan consensuado que no ha provocado el caos que esperaba la izquierda sino más bien al contrario", ha manifestado el delegado.

Borja Carabante ha insistido, por último, en que ahora se estudiarán las propuestas entre los servicios técnicos de EMT Madrid junto con los del Consorcio.