Recogida de firmas anti Ayuso en la consulta del médico

El seguimiento de la huelga de médicos y pediatras de Atención Primaria de Madrid tocó ayer fondo: solo el 1,39% de los profesionales secundó el paro en el turno de tarde de este jueves. Se trata del dato más bajo desde que arrancaron las protestas el pasado 21 de noviembre. El desplome en el nivel de apoyo a la huelga en poco más de dos meses ha sido de más de treinta puntos: del 31,66% en el inicio hasta el dato de ayer. Al rescate de estas cifras llega la manifestación que recorrerá este domingo el corazón de la capital con la intención de reeditar las imágenes de la marcha del pasado 13 de noviembre mediante la confluencia de cuatro columnas (Nuevos Ministerios, Plaza de España, Hospital de la Princesa y Legazpi) en la plaza de Cibeles.

En este contexto, algunas de las entidades que apoyan la marcha y el sindicato Amyts –convocante de la huelga– han intensificado otras vías de protesta con las que evidenciar su rechazo a las propuestas del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso para desbloquear la actual situación. Entre estas iniciativas, destaca la puesta en marcha de una campaña de recogida de firmas para que los madrileños que así lo quieran apoyen sus reivindicaciones.

Dentro de esta estrategia, LA RAZÓN ha podido comprobar cómo Amyts y el resto de entidades que impulsan esta campaña han introducido la recogida de firmas dentro de los centros de salud de la región e, incluso, tal y como aseguran algunos usuarios de la sanidad pública a este diario, en el interior de la propia consulta del médico. En determinados puntos de Atención Primaria, los pacientes pueden encontrar las hojas para firmar en apoyo de las propuestas sindicales en el mostrador de información y de petición de citas situado a su entrada. Este escenario se produce, por ejemplo, en centros de salud de localidades como Arroyomolinos, Pinto o Getafe. También en algunos centros de la capital como el de Valle Inclán (en Latina) y el de Paseo Imperial (en Arganzuela). En otros casos, estas hojas para firmar se encuentran en una mesa a la entrada del centro de salud bajo carteles en los que se insta a «salvar la atención primaria».

En horario laboral

Según las fuentes jurídicas consultadas, los empleados públicos –en este caso, médicos o cualquier otro profesional sanitario– no pueden realizar en su horario laboral actividades sindicales como, por ejemplo, la de instar a pacientes a apoyar con su firma sus reivindicaciones. Tampoco dedicar a tal efecto edificios de titularidad pública. En concreto, todo ello podría vulnerar hasta tres normas: la Ley 55/2003, de 16 de diciembre, del Estatuto Marco del personal estatutario de los servicios de salud; el Estatuto Básico del Empleado Público; y la Ley 3/2001, de 21 de junio, de Patrimonio de la Comunidad de Madrid.

Junto a Amyts, esta campaña de recogida de firmas está impulsada por entidades como Afem, CSIT-Unión Profesional o Atención Primaria se Mueve. Además de las tablas que los pacientes se encuentran en los centros de salud para introducir sus datos (nombre y apellidos, DNI y firma), también figuran las reivindicaciones sindicales, entre las que destacan el incremento del presupuesto en Atención Primaria, la cobertura inmediata de todas las plazas, la desburocratización de la consulta médica o la reducción del número máximo de personas que puede atender al día cada facultativo.

Debate bronco en la Asamblea

A este respecto, la presidenta Ayuso denunció ayer durante el Pleno que se celebró en la Asamblea la realización de «labores sindicales dentro de las consultas médicas y en horario de atención al ciudadano y recuerda que los centros de salud y los hospitales son de los pacientes». Y puso el ejemplo de uno de estos centros de salud: «El de Arroyomolinos, recién inaugurado, nuevo, con las mejores instalaciones, lo han estado vandalizando con pancartas, con sábanas, dando una imagen que es la que ustedes necesitan. Y no hay derecho porque no es suyo. Lo que están haciendo en Más Madrid es secuestrar los servicios públicos y privatizarlos para sus intereses políticos. Usted quiere reventar el sistema y culparme a mí. Es una huelga política que está siendo secundada cada día por 35, 39, 55 sanitarios de su sindicato político para decir que hay una huelga en Madrid». Durante su cara a cara con la portavoz de Más Madrid, Mónica García, la presidenta regional aseguró quela líder de la oposición lleva «desde el otoño pretendiendo alargar esta huelga e incluso elevarla a los hospitales. No le importa el daño que le está haciendo al sistema ni a los pacientes, propagando bulos, poniendo a la gente frente a la pancarta en lugar de estar al teléfono atendiendo al ciudadano como se merece y, sobre todo, provocando el distanciamiento con la sanidad. Y algo peor todavía, están asustando a los pacientes, como hicieron durante la pandemia, propagando lo peor del sistema». Mónica García, por su parte, recordó a Ayuso que el domingo van a salir a las calles a «defender con orgullo la sanidad Pública mientras en el PP estarán contando boicoteadores. Usted nunca debió de poner la sanidad en jaque». Y aseguró, ya en clave claramente electoral, que los madrileños tendrán que elegir en los comicios autonómicos del 28 de mayo entre «Sanidad o Ayuso».