Sara Hurtado: «Queremos que Madrid sea capital de la danza sobre hielo»

Fue el conflicto entre Rusia y Ucrania lo que le hizo cambiar de rumbo y volver a su ciudad natal, Madrid. La patinadora olímpica Sara Hurtado, vivía junto a su pareja de profesional, Kirill Khalyavin, en Moscú donde entrenaban desde 2016 y de dónde salieron poco después de iniciarse la Guerra. Dos meses después de encontrarse en la capital española, anunciaron su retirada después de ocho años patinando juntos. «Nos vimos en una situación precaria, la del hielo español en general, con una enorme falta de profesionalización en los entrenamientos», indica Hurtado a este periódico. Su experiencia en el extranjero, les ha servido para ser conscientes de lo que es necesario para cubrir todos los puntos que requiere una disciplina tan rica como es la danza sobre hielo. «Necesitamos un preparador físico, apoyo de ballet, bailes de salón y acrobacias, un coreógrafo...». En esta necesidad vieron la oportunidad de dar su experiencia a patinadores españoles o europeos creando su propia escuela.

Así nació hace un año SK Internacional Ice Dance School, la primera escuela de danza profesional en España. Solo doce meses después, cuentan con un grupo internacional de cuatro jóvenes parejas –de entre 18 y 22 años- , a las que ayudan a llegar al siguiente nivel, el de las categorías absolutas. «Era una pena que el talento español estuviese fuera por la falta de escuelas potentes en Europa. Queremos crear la escuela en la que nos hubiese gustado estar a nosotros y que Madrid se convierta en una capital de la danza sobre hielo», confiesa. Y es que aquí, han encontrado todo lo necesario para darles la mejor preparación, ya cuentan con un equipo muy potente de profesionales e intentan aportarles ese cariño y acompañamiento que alguna vez ellos echaron en falta.

«En Moscú estábamos bien, teníamos todos los polos cubiertos, pero no dejábamos de estar fuera de casa. Echamos en falta pequeños detalles, como el acompañamiento después de una competición mala». Es en estas situaciones en las que ellos quieren estar presentes y poder ayudar a sus alumnos. «Es un deporte muy burro, injusto y de mucha repetición. Debes enfrentarte al fallo constantemente y buscar una perfección que es imposible de conseguir», explica. Por ello, desde su experiencia y acompañados de los mejores profesionales, pretenden dar a sus alumnos herramientas para gestionar la frustración y la oportunidad de alcanzar su mejor versión. En la danza sobre hielo, la salud mental es tan importante -o incluso más- que la física. Por eso, contarán desde el año que viene con el apoyo de la Fundación Blanca, que pone a disposición de deportistas ayuda psicológica.

Aunque había impartido con anterioridad alguna masterclass y había prestado de forma puntual su ayuda en algunas coreografías, Hurtado nunca se había puesto al frente de un entrenamiento. Tampoco Khalyavin. «No es lo mismo enseñar que competir. Aunque tenemos una técnica y mecánica de entrenamiento fácil de enseñar, cada pareja necesita una profundidad de trabajo inmensa y distinta». En este tiempo, han podido mostrar su trabajo y demostrar que valen, ejemplo de ello es que haya patinadores interesados en trabajar con ellos. Por ahora, SK ya está presente en el mundo de patinaje; presente en competiciones internacionales en Budapest, Bratislava y muy pronto lo harán en Estambul, Alemania y el Lituania, para el Campeonato Europeo de Patinaje Artístico sobre Hielo. «Cualquiera que sea capaz de ver el potencial que tiene a nivel marca y valores nuestra escuela, lo que nuestros chavales hacen y por lo que luchan cada día, estamos seguros de querrán asociarse a nuestra historia», asegura. Es ahí, donde reside el mayor miedo de Hurtado, el de no poder conseguir apoyo económico y que sea la falta de dinero lo que no les permita seguir creciendo.

Además de estar al frente de la escuela, Hurtado es comentarista de Eurosports y trabaja con el Tour Universo Mujer, que cada año celebra cuatro eventos deportivos en las plazas de diferentes ciudades. «Es el ejemplo de la capacidad que tiene el deporte de incluir a todo el mundo, de transmitir valores y divertir a la gente». Una forma de conocer los diferentes deportes que se practican en cada zona, un espacio en el que juntar a referentes deportivos con gente, se fomente la práctica y erradicar el abandono del deporte en niñas que es alarmante. «La forma más directa de cambiar las cosas. Estoy segura que con el tiempo, se podrá medir el resultado de esto».