Medio Ambiente

Mares y océanos, la punta del iceberg de la lucha contra el cambio climático

Los residuos y la basura marina se han convertido en una problemática que impacta de manera negativa y directa en el cambio climático. El compromiso de los agentes sociales y el trabajo de concienciación son las dos grandes palancas que podrían ayudar a revertir esta situación

La conservación del medioambiente es una cuestión que nos engloba a todos.
La conservación del medioambiente es una cuestión que nos engloba a todos.UnsplashLa Razón

Cada año se arroja en todo el mundo un total de 8 toneladas de plástico a mares y océanos. La tónica de los últimos años se torna en ver imágenes de grandes superficies acuáticas repletas de basura, especies animales afectadas de manera negativa por estos residuos y diversas iniciativas promovidas por la sociedad, empresas e instituciones para tratar de paliar el daño que se está ocasionando al ecosistema natural.

Conscientes de esta problemática, varios organismos han impulsado programas específicos para tratar de revertir esta situación y poner fin a una de las mayores lacras actuales, la cual influye directamente en el cambio climático. Es el caso de PlasticsEurope, que trabaja con agentes del sector del plástico en la búsqueda constante de soluciones a los residuos marinos.

Por su parte, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico del Gobierno de España ha establecido un programa de seguimiento del estado de mares y océanos con el fin de tomar conciencia sobre esta problemática y ejercer como mecanismo de control para prevenir y eliminar los residuos en mares y océanos, ya sea basura flotante o residuos en playas, en el fondo marino o en los propios sedimentos.

En este sentido, es preciso tener en cuenta de que, más allá de estos programas o acciones orientados a la mejora de la salud de mares y océanos, la concienciación de todos los agentes sociales es el mejor mecanismo para la prevención.

Todos contra el cambio climático

La conservación del medioambiente es una cuestión que nos engloba a todos y en la que todos podemos aportar nuestro granito de arena. Todas las entidades, en su más amplio sentido, deben contribuir con el cuidado del entorno natural.

Desde Fundación Banco Santander, llevamos casi dos décadas trabajando en el campo de la recuperación de patrimonio natural y vegetal, ayudando a la conservación y protección de numerosas especies animales y vegetales y apoyando proyectos que contribuyan a la mejora de nuestro planeta”, asegura Álvaro Ganado, Responsable de Tecnología y Medio Ambiente de la Fundación Banco Santander.

La fundación de la entidad bancaria es consciente de su papel como agente de cambio. Su larga trayectoria y su compromiso con el cuidado y la recuperación del medioambiente se han materializado en multitud de iniciativas de diversa índole, lo que refuerza un rol determinante en la transformación verde. Este es el motivo de su apuesta firme en el análisis de los diferentes escenarios con la intención de tomar las mejores decisiones sobre cómo pueden ayudar de la forma más eficaz.

Desde la concienciación de toda la sociedad, Fundación Banco Santander apela a la necesidad de que las instituciones apoyen y lleven a cabo proyectos sostenibles que contribuyan a la mejora del mundo que nos rodea y a la protección del patrimonio natural. Su red de colaboraciones se extiende a diferentes organizaciones centradas en la recuperación y protección de la biodiversidad, así como en la investigación y en el avance científico. A lo largo de sus más de 20 años de recorrido, la Fundación Banco Santander ha participado en más de 30 proyectos, una muestra significativa de su trayectoria e implicación al respecto de esta problemática.

El denominador común de todos estos proyectos es el esfuerzo por crear redes de colaboración con el tercer sector para afrontar de manera conjunta los principales desafíos globales a los que en materia medioambiental nos enfrentamos. Un reto enorme que debemos afrontar con paso firme y decidido.

Santander for the Seas

Santander for the Seas es la última iniciativa de la fundación para proteger la biodiversidad de los mares y océanos. Según Álvaro Ganado, “con Santander for the Seas, iniciativa que hemos lanzado en 2021, ampliamos y focalizamos nuestros esfuerzos en materia medioambiental, apostando por la protección de la biodiversidad marina y las especies que lo habitan, convirtiendo este escenario en una prioridad de nuestras acciones”.

Santander for the Seas es una iniciativa que nace con el objetivo de apoyar proyectos innovadores enfocados en la conservación y recuperación de este medio. Mediante convocatoria pública, se seleccionarán 3 proyectos anualmente, con una aportación económica de 150.000 euros y con una duración de 2 años máximo.

Se podrán financiar proyectos nuevos, o bien otros que ya hayan comenzado y ahora se complementen con esta convocatoria. De esta forma, Álvaro Ganado se muestra seguro de la contribución que tendrá en zonas marinas: “ayudaremos a su restablecimiento, visibilizar el importante y determinante papel de la economía azul, luchar contra el cambio climático y utilizar de forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos, algo que es totalmente necesario para el desarrollo sostenible global”.

En línea con lo anterior, es preciso tener en cuenta que “nuestros océanos cubren dos tercios del planeta, producen el 50% del oxígeno en la Tierra, regulan el clima, entre otras funciones”. De ahí nace la importancia extrema que cobra su cuidado y mantenimiento.

Cuidar de mares y océanos: un reto presente y futuro

El momento de apostar por el cuidado del medioambiente es aquí y ahora. Como dice Ganado, hay que “actuar rápido, con propuestas sólidas, sostenibles y replicables, es determinante para revertir el deterioro que estamos causando”.

Esta es la mentalidad que debe marcar las diferentes líneas de actuación del presente y del futuro, con el claro objetivo de incrementar la conciencia sobre los problemas que afectan a nuestros mares y océanos y ser conscientes del daño que estamos ocasionando a nuestro planeta.

Por último, Álvaro lanza un mensaje para las futuras generaciones: “hay que fomentar que desde la escuela se desarrolle un pensamiento ecológico firme y potente que ayude a mitigar la situación que vivimos. Es fundamental para frenar el proceso destructivo de nuestro entorno la educación ambiental, entendida como un proceso donde la sociedad tome conciencia de la importancia de lo que nos rodea y nos ayude a protegerlo”. Al fin y al cabo, tenemos la capacidad para revertir la situación: “el destino de nuestro planeta está en nuestras manos y es necesario que desde la infancia aprendamos a racionalizar recursos y a aportar nuestro granito de arena en la lucha contra el cambio climático”, zanja.