No son ninguna broma las olas de clima extremo

El avance del cambio climático y el deshielo progresivo del Ártico ocasionan situaciones meteorológicas cada vez más virulentas, con olas inusitadas de frio o calor, nevadas anormales, fuertes vientos y episodios frecuentes de gotas frías o ciclogenesis explosivas. Hay una tendencia casi natural a restar importancia a estos cada vez más frecuentes fenómenos atmosféricos adversos.

Siempre hubo riadas y grandes nevadas, es verdad. La novedad de los últimos años, registrados sucesivamente con la palabra “récord”, es la relativa frecuencia con que tales situaciones se suceden. La explicación está, según los expertos, en los movimientos del Vórtice Polar derivados del progresivo calentamiento de La Tierra. Ojo con estas olas de clima extremo.