Renault electrifica sus modelos más vendidos

La electrificación de todos los modelos en producción, sean de cualquier categoría o fabricante, es un proceso sin vuelta atrás, propiciado por las exigencias de reducción de emisiones impuestas por la Unión Europea. Renault, que fue marca pionera en este camino con proyectos innovadores como el Twizy o Fluence, comienza ahora a comercializar soluciones híbridas e híbridas enchufables en tres de sus modelos más emblemáticos: Clio, Captur y Megane.

En todas ellas es común denominador la suavidad y el silencio, además de una autonomía en modo eléctrico de unos 50 kilómetros en el Captur y Megane, distancia suficiente para que la utilización diaria del coche por parte de la mayoría de los usuarios se pueda hacer sin gastar un gramo de carburante. Y la disposición de las baterías ha sido estudiada para que la reducción de espacio respecto a las versiones sólo de combustible sea mínimo. El sistema de recarga es muy sencillo, con un cable que se puede conectar a un enchufe doméstico, y tardará algo más de cinco horas en recargarse. Pero instalando un “wallbox” reduciremos apreciablemente el tiempo de carga que podrá ser de menos de tres horas.

Con esta iniciativa, Renault cubre la electrificación en los tres segmentos de clientela más solicitados. El Clio, como coche compacto de utilización más urbana, el Captur, como SUV del segmento medio que cubre las necesidades de la familia y el Megane, una berlina de amplias dimensiones sobre todo en esta versión enchufable ya que en principio sólo está disponible con la carrocería Sport Tourer, es decir, la familiar. En la prueba que realizamos del Clio (autorrecargable) es especialmente destacable las prestaciones en el modo de conducción Sport, con respuestas fulgurantes del acelerador gracias a la inmediatez de fuerza que proporcionan los motores eléctricos. Como decimos, el Megane, que cuesta treinta y un mil euros, se sirve únicamente con la carrocería familiar, aunque la versión berlina llegará a comienzos del año que viene.

La motorización de estas versiones denominadas E-Tech, híbridas enchufables, es común en el Megane y en el Captur. Se trata de un motor de gasolina de 1,6 litros atmosférico que ofrece una potencia de 91 caballos, a los que se unen dos motores eléctricos, uno de 49 y otro de 22 caballos, más la batería de litio con 9,8 kWh. Con todo ello se consigue una potencia de 159 caballos. La caja de cambios no tiene embrague ya que gracias a la acción de los motores eléctricos se iguala la velocidad de giro del cigüeñal y los sincros de la caja, razón por la cual el inicio de la marcha siempre es en modo eléctrico. Con esta combinación se consigue un comportamiento muy suave y una eficacia que, según los ingenieros de la marca, es similar a la de una caja con 15 relaciones. Además, el conductor puede jugar con la retención poniendo el selector en una posición más o menos suave, D o B, para incrementar la recarga de baterías.

Los Renault E-Tech pueden utilizarse con tres tipos de conducción: Pure, Sport y MySense. El primero de ellos lo usaremos para ir sólo con el motor eléctrico y el segundo, como requerimos prestaciones más elevadas, se utiliza para dar prioridad al motor de combustión. La tercera posición va combinando uno u otro sistema según las necesidades del conductor o las condiciones del tráfico que nos encontremos. También hay un botón para reservar una parte de la energía eléctrica para usarla cuando la necesitemos. Es el caso de quienes tienen programado entrar, por ejemplo, en el Madrid Central y quieren reservarse 20 o 25 kilómetros en modo eléctrico para ese momento. De esta forma, utilizan el motor de combustión para entrar en la ciudad desde sus alrededores y usan la parte eléctrica al llegar a la zona restringida.

En todos los casos las versiones E.Tech coinciden en sus formas y dimensiones con el resto de sus hermanos de gama, tanto en lo que se refiere a las formas de la carrocería como en los interiores, ya que la colocación de las baterías apenas resta espacio de carga en el maletero. Sólo incrementa el peso del conjunto por el peso de los acumuladores La marca francesa, uno de los líderes mundiales en coches eléctricos, mucho de los cuales se fabrican en las factorías españolas, dispone de una aplicación en el móvil para controlar varias funciones del coche, especialmente de la parte eléctrica.