Seguridad Vial

Conducir en lluvia: ¿Es mejor utilizar marchas largas o cortas?

La AEMAT predice una nueva borrasca que traerá lluvias generalizadas, especialmente en las mitades norte y oeste de la Península

La DGT pide "precaución" a los conductores por el temporal de lluvia y viento en gran parte de España
La DGT pide "precaución" a los conductores por el temporal de lluvia y viento en gran parte de EspañaEuropa Press

La conducción segura en condiciones de lluvia es un tema que a menudo suscita preguntas, sobre todo en lo referente a las marchas que deberíamos utilizar para circular con seguridad. Y es una cuestión que resulta apremiante, porque a medida que transcurre el mes de enero, la Agencia Española de Meteorología predice una nueva borrasca atlántica que traerá lluvias generalizadas, especialmente en las mitades norte y oeste de España. Ante esta situación, es crucial recordar las estrategias y técnicas adecuadas para garantizar una conducción segura durante la lluvia:

Recomendaciones básicas para conducir con lluvia

Un aspecto fundamental para la conducción segura en la lluvia es mantener los neumáticos en buen estado, ya que son el único contacto entre el vehículo y la carretera. Los neumáticos deben tener un dibujo adecuado y un desgaste que no sea extremo, siendo la profundidad mínima del dibujo de un neumático de al menos 1,6 milímetros. Además, mantener los neumáticos a la presión recomendada por el fabricante puede evitar desgastes asimétricos, mayor consumo de combustible y el aumento de las posibilidades de hacer aquaplaning, entre otras cosas.

Asimismo, es esencial recordar que el agua hace que la superficie de la carretera sea más resbaladiza, lo que requiere un aumento considerable en la distancia de seguridad con respecto al vehículo que nos precede. Esto es crucial para evitar colisiones en caso de frenadas imprevistas, ya que la distancia de frenado aumenta en superficies mojadas. Por ejemplo, la diferencia entre frenar en asfalto seco a 90 km/h y hacerlo en asfalto mojado es de 32 metros más.

Al conducir en la lluvia, debemos asegurarnos de que los limpiaparabrisas funcionen correctamente, ya que un parabrisas limpio mejora la visibilidad y facilita la toma de decisiones de manejo seguras. Además, debido a la visibilidad reducida en la lluvia, es importante señalar bien con los intermitentes y evitar maniobras repentinas, como giros bruscos del volante, lo cual puede provocar la pérdida de control del vehículo y pillar por sorpresa a otros usuarios de la vía.

La falta de lluvia puede hacer que nos olvidemos de cuidar los limpiaparabrisas, pero es en estos momentos cuando es más importante | Fuente: EFE/ Antonio Garcia
La falta de lluvia puede hacer que nos olvidemos de cuidar los limpiaparabrisas, pero es en estos momentos cuando es más importante | Fuente: EFE/ Antonio GarciaEFE/Antonio GarciaAgencia EFE

¿Marchas cortas o marchas largas?

Un debate común que surge cuando se conduce en condiciones de lluvia es si es más seguro utilizar marchas largas o cortas. Aunque intuitivamente podríamos pensar que las marchas cortas son más adecuadas para mejorar la tracción y evitar el deslizamiento, la realidad es que las marchas largas son generalmente más recomendables. Al usar una marcha alta, la velocidad de rotación del motor se reduce, lo que a su vez reduce la aceleración de las ruedas y por lo tanto, es menos probable que cause un derrape en una superficie resbaladiza.

Sin embargo, en situaciones de mucho viento, pero sin lluvia intensa, se aconseja usar marchas cortas, ya que proporcionan un mayor control del vehículo, lo que puede ser útil para contrarrestar los efectos del viento. Por otro lado, si la carretera está inundada o tiene una gran cantidad de agua, hasta el punto en el que estamos hablando de una balsa de agua y no de una película de humedad, se aconseja circular por la parte más alta de la carretera y usar la marcha más corta.