Motor

¿Puedo usar agua en lugar de refrigerante para enfriar el motor de mi coche?

Cuando un coche no logra controlar adecuadamente la temperatura del motor, puede producirse una avería grave

Si el líquido refrigerante se congela, aumentará su volumen y reventará elementos sensibles del vehículo
Si el líquido refrigerante se congela, aumentará su volumen y reventará elementos sensibles del vehículoLa Razón

El líquido refrigerante juega un papel crucial en el funcionamiento del vehículo. Gracias a él, nuestros coches pueden operar con seguridad, incluso en las condiciones más extremas. Su componente principal es el etilenglicol, un aditivo cuya función es evitar el congelamiento del líquido. Esto es fundamental cuando bajan las temperaturas, porque cuando el agua se congela, se expande. Y al aumentar su tamaño, puede dañar los componentes del motor.

El líquido refrigerante también se encarga de transmitir la temperatura del motor al radiador de refrigeración, evitando así su sobrecalentamiento. Pero no solo eso. Además de "amortiguar" el efecto de la temperatura en el motor, el líquido refrigerante también actúa como limpiador de estos componentes, ofreciendo protección contra la oxidación gracias a sus propiedades anticorrosivas.

Las bajas temperaturas pueden ser el peor enemigo de nuestros coches y causar daños irreparables
Las bajas temperaturas pueden ser el peor enemigo de nuestros coches y causar daños irreparablesDreamstime

O sea, que el líquido refrigerante es un elemento muy importante para el funcionamiento del vehículo. Ahora bien, ¿es fundamental? ¿O es posible que el coche siga funcionando si, en lugar de utilizar líquido refrigerante, usamos agua?

¿Es seguro utilizar agua en lugar de líquido refrigerante?

Puede ocurrir que estés en mitad de un trayecto largo y observes cómo la aguja de la temperatura se eleva por encima de los límites de seguridad establecidos por el fabricante. Cuando un coche no puede refrigerar adecuadamente todos los componentes del motor y se produce un sobrecalentamiento, lo que sigue es una avería grave, como una fuga en el circuito de refrigeración o una ruptura en la bomba de agua.

En este caso, es importante detener el vehículo en la calzada y poner las luces de emergencia. Pero cuidado, ¡no se debe rellenar el depósito con el motor caliente! El cambio brusco de temperatura podría dañar ciertos componentes del vehículo. Además, lo último que debemos hacer en este momento es manipular el tapón del depósito del líquido refrigerante. Está muy caliente y, además, a mucha presión. Por eso, si abrimos el tapón antes de tiempo, el líquido refrigerante saltará, pudiendo provocar quemaduras muy graves en la piel.

En este caso, lo mejor es esperar a que el motor vuelva a una temperatura segura. Una vez la temperatura del motor haya disminuido y la aguja se encuentre dentro de los límites, podremos rellenar el depósito del líquido refrigerante sin provocar un cambio drástico de temperatura que pueda dañar los componentes.

En caso de que estemos conduciendo y la temperatura aumente, pero sin llegar a sobrepasar la zona roja, así como en casos de alta demanda, carreteras de alta pendiente, días calurosos, atascos… es recomendable apagar el aire acondicionado para reducir la carga del motor y abrir las ventanas para enfriar el habitáculo. Algo que también puede ayudar es activar la calefacción, para -de esta forma- trasladar parte del calor al habitáculo y bajar la temperatura del motor.

En caso de que tengamos que seguir conduciendo y no tengamos a nuestra disposición líquido refrigerante, es mejor echar agua que no echar nada. Pero recuerda, esto puede hacerse únicamente como último recurso. Y si tenemos la opción, es preferible utilizar agua destilada, ya que las sales presentes en el agua generan la oxidación que pueden arruinar fácilmente el motor de un coche.

Indicador del líquido refrigerante
Indicador del líquido refrigeranteLa Razón

Así que, cuando hayas llegado a tu destino, y el motor esté frío, deberás reemplazar el agua por líquido refrigerante, ya que solo son necesarios un par de días para que se puedan empezar a ver los efectos del óxido en el motor. Por último, es importante recordar que el hecho de que el agua pueda utilizarse como recurso de emergencia, no significa -en absoluto- que podamos utilizarla a la ligera para refrigerar el vehículo.

Como explicábamos antes, los líquidos refrigerantes han sido cuidadosamente formulados para que sean capaces de absorber tanto el calor como el frío de forma mucho más efectiva. El agua, por su parte, tiene un punto de ebullición mucho más bajo (100ºC) y un punto de congelación mucho más alto (0ºC). Por lo que puede hervir mucho más pronto. Y por lo mismo, pero en sentido contrario, puede congelarse mucho antes.