Efectos del temporal

El temporal deja una estimación de daños de 30 millones de euros solo en Lorca

La superficie afectada en los invernaderos de flor cortada de Cehegín podría ascender a los 25.000 metros cuadrados, según Agricultura

La consejera de Agricultura, Sara Rubira, visita uno de los cultivos de flor cortada afectados en Cehegín
La consejera de Agricultura, Sara Rubira, visita uno de los cultivos de flor cortada afectados en CehegínLa Razón

El paso del último temporal de lluvias que ha sufrido la Región de Murcia ha dejado cuantiosas pérdidas, especialmente en el sector de la Agricultura. Las zonas que más se han visto afectadas han sido el valle del Guadalentín, en Lorca, y algunas pedanías cehegineras como Canara, cuna de la flor cortada, donde las primeras estimaciones que hacen los agricultores apuntan a más de 25.000 metros cuadrados de invernaderos damnificados por el persistente aguacero.

La consejera de Agricultura, Sara Rubira, se desplazaba este martes para comprobar sobre el terreno los daños ocasionados por unas precipitaciones que han hecho un especial daño a los cultivos de regadío. En el caso de Lorca, su alcalde, Fulgencio Gil Jódar, hacía un cómputo global de daños en la agricultura e infraestructuras, y aseguraba que los perjuicios de las lluvias torrenciales podían ascender a los «30 millones de euros». Gil Jódar hacía un especial hincapié en que la jornada del jueves había sido nefasta: «tenemos afectadas más de 1.000 hectáreas de regadío, sobre todo, de brócoli, de lechuga y de espinaca, podríamos estar hablando de daños de entre 12 y 13 millones de euros», apuntaba. Por eso, incidía en que van a solicitar la declaración de Zona Catastrófica, «que vamos a dirigir a la Delegación del Gobierno, con el apoyo de nuestro Gobierno regional». Jódar explicaba que el Ejecutivo central debe «resarcir» a esos agricultores, ya que «la mitad de la economía de nuestro municipio depende del sector agrario», recordaba. «Tienen un horizonte muy malo».

Cultivos como la lechuga han perdido la raíz y se van a secar, como consecuencia del exceso de agua. Además, otro de los enemigos que se presentan ahora son las plagas, que también merman la cosecha. Ahí, la consejera Sara Rubira apuntaba que su departamento está ahora mismo «haciendo una evaluación de las pérdidas», pero no quiso aportar cifras definitivas. «Hay fincas que absorben muy bien el agua, pero hay algunas parcelas que tienen partes anegadas y estamos preocupados por la aparición de hongos», comentaba Rubira.

Por último, los agricultores del valle del Guadalentín también expresaron su incertidumbre respecto de algunos cultivos de regadío, como el melón y la sandía. Peligran, por tanto, las campañas de verano de estas frutas, que ya deberían estar plantadas sobre tierra seca. «Esperamos que absorban el agua lo antes posible», explicaba la titular del departamento de Agricultura del Gobierno regional.

La flor cortada, al traste

La segunda parada de Sara Rubira fue en Cehegín, en concreto, en pedanías como Canara, una zona especializada en un cultivo muy delicado, la flor cortada, que no ha sido ajeno al zarpazo del temporal. La alcaldesa de este municipio, Alicia del Amor, agradecía el interés mostrado y el «compromiso firme» del Ejecutivo autonómico, a la vez que apuntaba que los daños se han producido en «pasos de río, infraestructuras de regadío y carreteras secundarias». La primera edil ceheginera también informaba de que iban a mantener una reunión con los colectivos más golpeados, como es el caso de ‘Heredamientos de Acequias’, «que es una de nuestras principales preocupaciones», decía Del Amor. No en vano, las primeras estimaciones que hacen los propios damnificados hablan de 25.000 metros cuadrados de invernaderos que han sufrido daños, como consecuencia de las inclemencias meteorológicas. Aquí los destrozos se focalizan también en infraestructuras, en colectores de saneamiento y en unos cultivos que son predominantes en esta zona, como es el caso de la flor cortada. «Estamos viendo la afección que está teniendo», aseguraba la consejera Sara Rubira.

Algunas organizaciones agrarias con presencia en la Región, como es el caso de COAG ya anticipaban hace unos días que los daños superaban los 12 millones de euros. José Miguel Marín corroboraba este martes, en declaraciones a LA RAZÓN esa cifra, que podría crecer los próximos días, cuando se formalice la petición al Gobierno de Pedro Sánchez la declaración de Zona Catastrófica por las lluvias.