Opinión

Dar refugio

Se que la migración humana es un asunto complejísimo. Pero también se que querer es poder: Querer ayudar, querer dar refugio. Querer. Yo conozco a muchos inmigrantes a través de “Caídos del Cielo”, ONG en la que trabajamos para incluir y visibilizar a las personas excluidas. Imparto talleres de teatro y realizo espectáculos con españoles sin hogar. También con los más sin hogar de todos: los que no solo han perdido su casa, su trabajo, su cabeza... han perdido también su tierra, se les ha quebrado la raíz. En estos dos últimos años hemos asilado en los talleres a más de cien alumnos refugiados e inmigrantes, personas de muchas nacionalidades y razas. Les he dirigido en un espectáculo donde la música y la danza, dado la dificultad con la lengua, han sido la base de su creación. Hemos estrenado “Una guarida con luz” en el Teatro Conde Duque hace dos meses. Y les prometo por mi alma, que la mayoría de estas personas, que se ven obligados a huir de sus países, son gente buena, responsable y trabajadora. Es increíble que, aún con el shock postraumático del viaje, se entreguen a convertir su dolor en belleza; con sus danzas, sus cantos, sus improvisaciones. Es increíble que a pesar de las enormes dificultades con las que se encuentran aquí, cumplan los horarios, respeten el aprendizaje y la diferencia. Es increíble que hagan las representaciones para el público con esa entrega total. Me gustaría enseñarles fotos en los camerinos: amor, risas, abrazos de gente de todos los colores. Esperando ahora, que no solo de pan se vive, a que algún teatro les acoja para seguir mostrándonos esa maravilla. Ellos no nos van a quitar nada. Les aseguro que vienen a dar