Opinión

¡Ya está bien!

¿Por qué no se ha puesto en marcha una campaña masiva y progresiva de test a toda la población, cuando ya vamos para cerca de dos meses de confinamiento? ¿Cómo es posible que a estas alturas de la situación haya muchos sanitarios a los que todavía no se han hecho pruebas, cuando deberían ser los primeros? Y lo anterior es válido también para los otros colectivos que están más expuestos a un posible contagio. ¿Cómo es posible que, según denuncias de colectivos de sanitarios de ayer mismo, todavía no tengan los elementos imprescindibles de protección individual y colectiva? ¿Por qué no se están utilizando todos los recursos disponibles en la lucha contra la pandemia como, por ejemplo, los laboratorios públicos veterinarios que disponen de una capacidad masiva para analizar las pruebas de los virus, según han denunciado los veterinarios? Y así se podría seguir con una pregunta tras otra. Frente a eso, ¿con qué nos encontramos? Pues con otra petición de prórroga del Estado de Alarma por parte del Gobierno de Sánchez y de Iglesias, para seguir limitando nuestras libertades más básicas. En el artículo 3 de la Declaración Universal de Derechos Humanos de la ONU se dice que «todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona». En el artículo 13, punto primero, se establece que «toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado». No han sabido proteger nuestro derecho a la vida y encima nos cercenan nuestro derecho a la libertad una y otra vez. ¡Ya está bien!