¿Habrá «maná» de Bruselas?

Los indicadores económicos de España siguen empeorando, mientras su Gobierno está de vacaciones: ayer conocimos que la deuda pública marcó un récord en junio y alcanzó 1,28 billones de euros; esta nueva cifra publicada por el Banco de España equivale al 114 por ciento del PIB. Para paliar en parte la grave situación económica, el Gobierno Central, que sigue de vacaciones, confía en lo que podríamos llamar el «maná» europeo, es decir, en esos 140.000 millones de euros, que, según parece, nos van a corresponder de ese Fondo de Recuperación dotado con 750.000 millones, aprobado hace ya casi un mes en la última Cumbre Europea. Pero, al margen de operaciones propagandísticas y de los aplausos de los ministros (esos que están de vacaciones) a su presidente (que también sigue con sus días de asueto) a su vuelta de Bruselas, es necesario ganarse ese dinero, que está sometido a condiciones. Así, de entrada, hay que presentar un plan nacional con las distintas medidas y programas a los que se va a destinar esa «pasta», algo que urge preparar; después, la Comisión Europea debe dar su visto bueno. A continuación, será necesario ejecutar en tiempo y forma ese plan y que, nuevamente, Bruselas lo apruebe. Solo entonces llegará la totalidad del dinero. Y ahí viene la gran pregunta: con el Gobierno gozando de sus vacaciones, ¿alguien se está preocupando de preparar ese plan? No digo yo que el presidente y sus ministros no tengan derecho a vacaciones, solo recuerdo que ni el coronavirus ni la situación económica se han dado tregua.