Impuestos

La izquierda va a por usted, señora

Prepárese, por tanto, a pagar más, y a pagar más por todo, pero también a ser intoxicada con un copioso argumentario antiliberal, que ya están distribuyendo las izquierdas entre las voces amigas

Ayer informó nuestro periódico de la «confiscación contra Madrid y el contribuyente» que va a perpetrar el Gobierno progresista, obsesionado con Isabel Díaz Ayuso, porque «su política de baja fiscalidad ha dejado en evidencia a la izquierda».

Una víctima ha sido el propio candidato socialista. El señor Gabilondo prometió no aumentar los impuestos, y la ministra María Jesús Montero lo dejó en ridículo, anunciando la intención del Gobierno de subir Sociedades, Patrimonio, Sucesiones y Donaciones. Por supuesto, como siempre, escudándose detrás de los consabidos «expertos», a los que, como siempre, se hará caso en la medida en que confirmen las recomendaciones oficiales.

No están los socialistas malogrando las expectativas electorales de Gabilondo porque sean tontos, sino porque su primera prioridad es la Moncloa, no la Puerta del Sol. Esa prioridad exige servidumbre a los ultras de Podemos y de ERC, que jamás han ocultado su anhelo de que los madrileños paguen más impuestos.

Asimismo, los proyectos de aumento del gasto público, más allá de las ayudas europeas, conducen a un sablazo fiscal en toda España. La clave política es que la izquierda debe ocultar este sablazo, que la empobrecerá a usted, señora, viva usted en Madrid o en cualquier otra parte de España.

Prepárese, por tanto, a pagar más, y a pagar más por todo, pero también a ser intoxicada con un copioso argumentario antiliberal, que ya están distribuyendo las izquierdas entre las voces amigas. Le doy algunas pistas. Insistirán mucho en Madrid, por supuesto, replicando las mentiras separatistas sobre que Madrid nos roba, el dumping fiscal, el paraíso fiscal, etc. Sin olvidar la famosa «armonización», que, naturalmente, nunca es a la baja. Y la famosa «brecha fiscal» entre España y Europa, que, naturalmente, tampoco es a la baja.

Habrá también argumentos internacionales, porque nuestros progresistas aprovecharán la ola intervencionista planetaria. Así, oirá usted hablar mucho de Joe Biden y Janet Yellen, que también quieren subir los impuestos en Estados Unidos; y en todo el mundo, resucitando la fiscalidad global sobre las empresas, que había frenado Trump.

Le dirán, claro está, que esto es sobre las grandes fortunas, insistirán en que lo recomienda el Fondo Monetario Internacional, que no es el Partido Comunista, etc. Pero no se engañe. Van, como siempre, a por usted, señora.