PSOE

La campaña contra Feijóo

«Mostrarlo como una marioneta de los ricos y los barones del PP, especialmente de Ayuso, es una solemne estupidez»

Es bueno reconocer que la izquierda política y mediática es implacable. Cuando se pone en marcha se convierte en una apisonadora, aunque no siempre obtiene los resultados que persigue. El blanco ahora es Feijóo. Lo que hemos visto hasta el momento ha sido solo el aperitivo. Ha comenzado la gran batalla para destruir al líder del PP, polarizar la sociedad, movilizar el voto y conseguir la continuidad de Sánchez. Los Barroso de turno y el entramado mediático y empresarial al servicio del PSOE se juegan mucho en esta partida. No hay que sorprenderse, porque Aznar, Rajoy y Casado también sufrieron estas campañas. El relato gira alrededor de la renovación del CGPJ y la actitud obstruccionista del PP, porque estaría incumpliendo la Constitución. Con el fin de que se entienda qué quiere decir esta disparatada afirmación, significa que debería aceptar gozoso la reforma del delito de sedición, así como todo aquello que quiera el inquilino de La Moncloa. Hace unos días me sorprendió que la utilizara Felipe González, porque miembros de su Gobierno, bajo las órdenes de X, autorizaron las actuaciones de los GAL. Es decir, se torturó y asesinó a ciudadanos españoles. No he encontrado en nuestra Carta Magna un título habilitante que ampare los crímenes de Estado o la corrupción masiva de su partido.

El pactar con los herederos de ETA o los independentistas, cuyos líderes fueron condenados por el Supremo, no es el mejor aval. Es cierto que lo que se está viviendo con el Poder Judicial es un esperpento, pero Sánchez podría impulsar una reforma acelerada del sistema de elección y se acabaría el problema. Ha gobernado a golpe de real decreto-ley, al igual que Rajoy, y no creo que le tiemble la mano a la hora de acelerar los trámites parlamentarios. No es una historia de buenos y malos como pretende la izquierda para conseguir un relato que le beneficie, cosa que dudo, electoralmente. La campaña contra Feijóo no dará ningún resultado. Mostrarlo como una marioneta de los ricos y los barones del PP, especialmente de Ayuso, es una solemne estupidez. Tezanos pondrá su parte con las encuestas a la carta del CIS. Lo mismo hará el entramado mediático controlado por Barroso, así como los neosanchistas siempre dispuestos a ejercer de palmeros monclovitas. Sánchez se tendría que buscar mariachis menos chapuceros.