El apagón informativo se cronifica

Ha pasado un mes del gran apagón que desconectó a los españoles de la vida del primer mundo para hundirnos en el tercermundismo. El Gobierno relativizó el drama y también su silencio. Y así seguimos. Emplazaron a los ciudadanos a unos meses para saber qué había ocurrido. Lo que Moncloa sí conoce es que las razones no guardan relación con nada que pueda poner en cuestión la política energética de Sánchez y su fobia a lo nuclear. De hecho, recuperados del soponcio y viniéndose arriba, Red Eléctrica, o sea el Gobierno, ha asegurado que se operó con la necesaria generación convencional, suficiente para cubrir la demanda, proporcionar inercia, permitir el control de los flujos y disponer de recursos para el control dinámico. Esta suficiencia no casa con que Moncloa haya duplicado las obras en nodos críticos para blindar la red, como informamos hoy. Si otro apagón era imposible, a qué viene tal vorágine de intervenciones en subestaciones. La oscuridad sigue.