Silencios

Todos dicen dentro del PP que Francisco Álvarez Cascos será su candidato por Asturias. Todos dicen que Francisco Camps será, pese a quien pese, designado candidato después del verano, en un acto conjunto, eso sí, y no en una proclamación individual con el respaldo de toda la cúpula. También dicen que el líder nacional no pone la mano en el fuego por ninguno de los que están saliendo en los "papeles"por supuestos delitos de corrupción, aunque, por ejemplo, en el caso del presidente de la Diputación de Alicante la información que manejan en Génova es que no hay pruebas sólidas en su contra. Todos dicen, menos Rajoy, que fiel a su estilo no dice ni palabra, excepto los discursos en los variados actos-mitin de su partido. Salvo sorpresa, Génova incluso ha organizado la mediática reunión con el presidente del PNV, Íñigo Urkullu, como para que sólo tenga cobertura gráfica, para que así el líder nacional no se someta a las preguntas sobre la última estruendosa operación de la Fiscalía Anticorrupción contra el PP valenciano. Rajoy se ha ido decantando cada vez más por esta estrategia del silencio, siguiendo el paso de su portavoz de Justicia, Federico Trillo, que ha implantando la técnica del comunicado de prensa para trasladar sus opiniones sobre cualquier cosa. El problema es que ese modelo del silencio se extiende también de puertas adentro y a veces la "mano derecha"de Génova no sabe lo que está haciendo la izquierda.