Lesiones musculares

Da la impresión de que antes de que los futbolistas lleguen al hartazgo de partidos se están superando las cifras de lesiones musculares. Diego Costa, el nuevo Mesías de «La Roja», no ha podido cruzar el Mar Rojo y sólo cuenta en su poder con las tablas legales de la nacionalidad española. No podrá debutar en los dos próximos bolos del equipo nacional después de haberle jurado amor eterno.

La ausencia del jugador del Atlético de Madrid no parece grave problema para Vicente del Bosque. El inconveniente sólo es la demora del debut. Llamar a Fernando Llorente, que ya ha encontrado sitio en la Juventus, cubre el puesto. Pero, con esta lesión, lo que se pospone es la posibilidad de alinear juntos a Diego Costa y Villa, que en su equipo da la impresión de que se complementan muy bien y han creado euforia entre los suyos. Salvo en Villarreal, donde fueron ninguneados.

Demora preocupante es la de Leo Messi. Por tercera vez se ha lesionado el argentino y ello debe intrigar a los dirigentes del Barcelona, porque hay demasiadas recaídas y en tan poco tiempo. El jugador, incluso en partidos en que se daba por supuesto que se encontraba físicamente en condiciones de jugar, parecía que lo hacía con miedo, que se reservaba. No tenía plena confianza en sus músculos y nadie mejor que él para conocer el estado de los mismos.

Messi no volverá a jugar hasta comienzos del próximo año, lo que representa daño importante para su equipo. Aunque se haya comprobado que sin él se puede vencer, la tensión de los defensas adversarios no es la misma si está delante.

Posdata. Marc Márquez, auténtico número uno. Las motos son sólo españolas.