Reyes Monforte

Ojalá

Ojalá
Ojalálarazon

Llámenme agorera, pero no le arriendo las ganancias a esta prueba neuronal. Y desde aquí, perdón a la familia de Marta por el escepticismo, que lo ignoren. Por lo que cuentan, la prueba en cuestión mide la actividad de la onda cerebral P300: una onda de información almacenada en el cerebro. En el supuesto de que haya alguna actividad en el cerebro de un ser capaz, no sólo de quitarle la vida a una persona, sino de ocultar como una alimaña infecta el paradero del cuerpo de Marta alargando la agonía de sus padres durante más de 5 años. Lo que no entiendo es por qué no se ha hecho antes una prueba de estas características. Si existe algo así y no es un simple elemento de ficción en las series y las películas, ¿por qué no se ha realizado hasta ahora? Espero que no sea porque alguien haya considerado más primordial el derecho a decidir de un condenado por el asesinato de una menor que el derecho de la familia de la víctima a saber dónde está el cuerpo de su hija, aunque por estos lares hay cerebros así de «comprensivos».

Deseo que el eminente neurofisiólogo pueda realizar un buen trabajo y obtenga resultados, aunque sólo sea por justicia divina,

ya que la terrenal sigue resistiéndose. Pero si este impresentable no se ha inmutado hasta ahora, ni ha mostrado debilidad, y mucho menos compasión, dudo que la simple visualización de unas imágenes logren sacarle algo de un cerebro sucio, enfermo, y especialmente frío. De todas maneras, confiemos en la ciencia, ya que en la Justicia, cada día nos lo ponen más difícil.