El trípode
«Como decíamos ayer…»
La Delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, ¿a qué espera? ¿Y el portavoz socialista en el Congreso que «estudió ingeniería industrial…»?
Es una frase que está en la Historia vinculada a dos destacados personajes, ambos profesores de la prestigiosa Universidad de Salamanca: nada menos que Fray Luis de León en el siglo XVI y Miguel de Unamuno en el siglo XX. El motivo del primero es que solía comenzar sus clases con esa expresión, aludiendo a la inmediata clase anterior impartida por él, y que la repitió cuando, tras estar 5 años recluido en prisión acusado de herejías ante la Inquisición, retornó a la Universidad tras ser declarado inocente. En cuanto a Unamuno, se le atribuye por pronunciarla emulando a Fray Luis de León, tras volver al aula universitaria tras siete años de exilio forzoso en Canarias, por escribir críticas durante la dictadura de Primo de Rivera. Sentada esa realidad –y salvando todas las evidentes distancias–, la utilizamos hoy por referencia al Trípode de ayer que titulábamos: «Importante: la dimisión vuelve a la política». La razón invocada era la dimisión del «Comisionado del Gobierno para la reconstrucción valenciana tras la DANA», por haber falseado su currículum y que a su vez traía causa de la anterior dimisión de la diputada del PP Noelia Núñez, por un motivo similar. Y «decíamos ayer» que la dimisión, como conducta propia de una democracia donde los valores éticos y morales se respetan –y que había desaparecido de España con el sanchismo– había vuelto con el ejemplo de la política madrileña. La noticia es que ayer se cumplió ese pronóstico con una nueva dimisión por un motivo similar, protagonizado en este caso por un Consejero de Gestión Forestal y Mundo Rural, del Gobierno autonómico de Extremadura, Ignacio Higuero. Era de Vox cuando esta formación estaba en la coalición gubernamental y siguió de Consejero dándose de baja de su partido cuando éste abandonó el gobierno. Llegados a este punto, es oportuno plantear: la Delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, ¿a qué espera? ¿Y el portavoz socialista en el Congreso que «estudió ingeniería industrial…»? Hay diversas maneras de mentir; una es hacerlo de forma evidente, y otra es hacerlo mediante una «verdad a medias», que es una «doble mentira». De momento, en apenas una semana ya son tres los políticos que dimiten por haber mentido en sus currículos, lo que resulta esperanzador en la medida en que establece un «antes y un después» respecto del código de conducta sanchista caracterizado por haber expulsado de la actividad política la necesidad de sujeción a la verdad y el rechazo de la mentira. Ello siguiendo a su «presimiente», que no miente, sino que «cambia de opinión» cuando le conviene. Hasta The Economist ya dice: «Lucha por su vida política, y debe dimitir».