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Biblioteca Harley-Davidson

Contextos inventados

Los catalanes agradeceríamos al señor Spielmann que, ya que vive tan lejos, no tenga la absurda pretensión de decirnos cómo es nuestra vida desde el desconocimiento de su distancia

Las decisiones jurídicas, los dictámenes y las sentencias podemos verlas como arbitrarias o caprichosas pero, en realidad, si las leemos con detalle, están obligadas a venir explicadas cuidadosamente con las causas que las justifican. Por eso sorprende la negligencia con la que el abogado de la UE ha respaldado su opinión sobre la amnistía.

La falta de solidez de sus argumentos podría ser en principio tan solo opinable. Pero llega un momento en que sencillamente el abogado inventa en su exposición un supuesto contexto necesario de reconciliación en la región y ahí niega los hechos simplemente observables y falta a la realidad. La realidad es otra: los catalanes podemos llevar como orgullo el hecho de no habernos agredido nunca entre nosotros a pesar de tener proyectos de país muy diferentes. En ningún momento hemos andado a tortazos por las calles, ni ha habido bandos que chocaran violentamente.

El abogado de la UE pretende despojarnos de nuestro principal mérito y orgullo que es ser pacientes y civilizados, incluso a pesar de las decisiones delirantes de unos políticos irresponsables que iban contra la ley y podían llevarnos a escenarios de confrontación. Y nadie puede inventarse supuestos enfrentamientos para justificar un contexto de necesidad. La única necesidad son siete votos, no una reconciliación

Inventarse contextos imaginarios e inexistentes para respaldar un diagnóstico hace pensar en alguien con un sesgo preconcebido para llegar a la conclusión que él desea y le conviene. Pero los catalanes agradeceríamos al señor Spielmann que, ya que vive tan lejos, no tenga la absurda pretensión de decirnos cómo es nuestra vida desde el desconocimiento de su distancia. Sería mejor que antes viniera, hablara con la población, conociera su trayectoria e historia y no se fiara tan solo a cuatro informaciones fabricadas por una élite política interesada. Los contextos hay que verlos con los propios ojos y, si no, abstenerse de describirlos.