...Que se mantiene como ideal común en Alemania

El resultado de las elecciones generales alemanas ha traido, como novedad más llamativa, la llegada al Parlamento federal de los ultraderechistas de la AFD, que superan el 13 por ciento de los votos, y la «resurección» de los liberales, que vuelven a la Cámara con un 10 por ciento de los sufragios. Ambos partidos recogen los frutos del desgaste sufrido por la gran coalición del centroderecha y los socialdemócratas, pero sin la suficiente fuerza como para cambiar el destino de Alemania. La CDU de Angela Merkel, que ha perdido el nueve por ciento de sus apoyos, se ha visto fracturada por su derecha, especialmente en los estados de la antigua RDA, golpeada por el problema de los refugiados. El SPD de Martin Schulz ha obtenido el peor resultado de su historia, con un escuálido 20 por ciento de los votos. A expensas de lo que hagan finalmente los socialdemócratas, que han anunciado su intención de no repetir coalición, Merkel podría contar con liberales y verdes, que repiten resultado con el 9 por ciento, para retener el Gobierno. A pesar de la caída de los dos grandes partidos, la inmensa mayoría de los escaños del Parlamento seguirán en manos de diputados que comparten un ideal común sobre la UE y que mantienen que Alemania debe seguir liderando el proceso de integración europeo. Los valores de unidad del viejo continente no han sido derrotados, sino que se refuerzan, pese a la irrupción del populismo.