ETA frente a España: «Ni vencedores ni vencidos»

Una actriz vasca con una singular proximidad con el mundo abertzale acreditada por ella desde hace años (pese a su juventud), acaba de ver rescindido el contrato que le vinculaba con una firma automovilística de alta gama de la que era una de sus más significativas caras publicitarias. El motivo alegado ha sido haber aparecido en los medios y sobre todo en las redes sociales de manera destacada, portando la pancarta de cabecera de la manifestación celebrada este pasado sábado en Bilbao bajo el lema «Llaves para la resolución». Ese eufemismo encubría la exigencia de la entrega de las llaves de las celdas de las prisiones donde cumplen condena centenares de presos etarras.

A esa manifestación sólo faltó la persona física de Sánchez, porque su espíritu estuvo omnipresente representado por todos sus «progresistas» socios, encabezados por Bildu y el PNV, acompañados de ERC, Junts y el BNG. Así, el manifiesto leído al final destacaba y agradecía en euskera, catalán y gallego el apoyo de esas formaciones a la marcha reivindicativa del «respeto a los derechos fundamentales que asisten a las personas presas», para «abrir el camino de regreso a casa de las personas presas, exiliadas y de portadas vascas» como «la única manera de poder avanzar hacia una sociedad en convivencia». Por supuesto, ajeno a un «escenario de vencedores y vencidos, que es un escenario imaginario», y también a «las ansias de paz de la inmensa mayoría de la sociedad vasca».

Ese manifiesto podría haberlo redactado y leído Sánchez sise lo hubiera exigido cualquiera de sus progresistas colegas, ante todo teniendo presente que él posee acreditada experiencia de indultos y amnistías a quienes han sido juzgados y condenados por el Tribunal Supremo por cometer graves delitos. Y además todo ello para «favorecer la convivencia», como reclaman para los etarras y, obviamente, «sin vencedores ni vencidos». Los 857 asesinados por ellos y las miles de víctimas provocadas por su actividad terrorista durante más de 40 años, han sido «en favor de la convivencia».

Sánchez con sus actos da respuesta a esa exigencia. Las llaves de Pamplona ya están entregadas, y las otras están a punto. Y sino, que se lo pregunten a Junqueras, Turull y Cia., con Puigdemont de protagonista estelar. Rescindido el contrato publicitario, a Itziar no le faltan sucesores con cualquiera de ellos, pese a que es justo reconocer que ni Otegi ni Sánchez tienen el encanto físico y atractivo de la abertzale y publicitaria actriz. Aunque sobre gustos no hay nada escrito. Y con ellos, de ética y moral, tampoco.