Sin Perdón

El metaverso de Pablo Iglesias

«Yolanda Díaz es lo que más se aproxima a Moisés bajando del Monte Sinaí con las Tablas de la Ley»

He encontrado la solución mágica para resolver las tribulaciones de Iglesias. No hay duda de que todo el mundo le traiciona. Es un incomprendido de manual. Los españoles le dan la espalda sin ponderar su exuberante talento. El político, politólogo, intelectual, escritor, columnista, periodista, jurista, filósofo, historiador, economista, revolucionario de salón, pequeño burgués…. no tiene quien le entienda. Por ello, la única salida reside en el metaverso. Es la realidad paralela donde podrá encontrar la felicidad. No aseguro que pierda su aire bronco, pero convertirá ese mundo imaginario en la sociedad distópica perfecta donde no se encontrará a Yolanda Díaz, Errejón, Mónica García, Colau, Bescansa y tantos otros que no le ven como el gran timonel que desearía ser. Mucha gente ha visto la película «La desolación de Smaug». Es la segunda de las tres partes de la adaptación cinematográfica de «El hobbit» de Tolkien. Había que sacarle provecho al éxito de «El señor de los anillos». Los guionistas lo consiguieron. Iglesias me recuerda al dragón Smaug el Dorado, un ser malvado y desagradable que llegó a la Montaña Solitaria atraído por las riquezas acumuladas por los enanos y que perezosamente dormitaban encima de sus tesoros.

Lo que se está viviendo sería «La desolación de Iglesias», porque vive encerrado en su caverna ideológica rodeado de sus adeptos y rabioso contra el mundo porque nadie le quiere. La realidad es que todos están hartos de él. Al igual que en el rey desnudo, se han dado cuenta de que Podemos es el pasado y Sumar es el futuro, aunque la euforia de la propaganda de la izquierda mediática es un exceso fruto de la adscripción ideológica. He de reconocer que la puesta en escena ha sido impecable. Han calentado bien los días previos. Yolanda es lo que más se aproxima a Moisés bajando del Monte Sinaí con las Tablas de la Ley. Es la heroína que necesitaban los 15 partidos de la plataforma, Comisiones Obreras y, sobre todo, Sánchez. Todos se han dado cuenta de que Podemos resta y que las amenazas de Iglesias son palabras vacías, porque los votos los tienen los que se reunieron este domingo para encumbrar a su enemiga Yolanda. Nada sería más favorable para el PP que Sumar y Podemos fueran juntos.

Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE).