Sin Perdón

El PP y el problema de Barcelona

El secretario general del PSOE necesita conseguir la alcaldía de Barcelona para intentar minimizar el desastre de las pasadas elecciones

La izquierda política y mediática pretende que el PP haga alcalde al socialista Collboni, que no ganó las elecciones, para que gobierne con la formación de Colau, que quedó tercera. Es decir, que apoye para mi ciudad la coalición que actualmente gobierna en España. Mientras tanto, los socialistas son fieles y sumisos aliados de los independentistas de ERC en el gobierno catalán. Por su parte, el partido de Colau, socio de Yolanda Díaz, está formado por comunistas y antisistema, y defiende, además, un referéndum de autodeterminación. No está nada mal. A esto hay que añadir que Collboni ha sido teniente de alcalde y gobernado en coalición con la derrotada alcaldesa. Es copartícipe del desastre que han creado en la capital catalana. Los votantes del PP no quieren que se repita el mismo equipo que ha protagonizado estos últimos años tan nefastos. Han votado a un candidato y unos concejales que no pueden ser los tontos útiles al servicio de una alianza de socialistas y comunistas.

Por supuesto, la presión se traslada a que el PP dejaría gobernar a Trias que encabezaba la lista de JxCat. No lo sabía, aunque hace décadas que lo conozco, pero deben considerar que es un peligroso independentista que proclamaría la secesión. Es lo que hicieron los socios preferentes de Sánchez en Madrid y de Collboni en Cataluña, ya que le presta su apoyo parlamentario. El secretario general del PSOE necesita conseguir la alcaldía de Barcelona para intentar minimizar el desastre de las pasadas elecciones. Es verdad que lo ha querido tapar convocando elecciones generales. Ha conseguido silenciar a los barones críticos e incluso impedir movimientos que cuestionaran su candidatura. El PP tiene que votar a su candidato y no puede propiciar que la alcaldía siga en manos de socialistas y comunistas. Trias será un alcalde débil y es absurdo, desde luego, pensar que utilizará la institución, como hicieron los socios de Sánchez con la Generalitat, al servicio de la independencia. No tiene ningún margen con 11 concejales y se supone que el PSC se sumaría a Vox y el PP para reprobarle.

Francisco Marhuendaes catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)