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Fase de desescalada: solo siete regiones están preparadas

Murcia, Canarias Extremadura, Andalucía, Valencia, Baleares y Asturias están cerca de los parámetros para la desescalada

Contagiados en España por 100.000 habitantes en catorce días
Contagiados en España por 100.000 habitantes en catorce díasAntonio Cruz

En la actual situación el Gobierno está priorizando la gestión de su imagen y el mantenimiento del mando único mientras se mantenga este estado de alarma. Todo parece indicar que intentará alargar está situación excepcional en el funcionamiento de los poderes del Estado hasta el más que probable rebrote del virus en otoño. Sea como fuere, solo un puñado de regiones españolas están hoy por hoy preparadas para la desescalada parcial. Se trata de las comunidades autónomas que tienen un ratio de casos por cada 100.000 habitantes menor que la media nacional (88,4) o incluso muy por debajo de la media italiana (51,2). Es el caso de Murcia con 1,67 casos por cada 100.000 habitantes, Canarias con 11,56, Extremadura con 14,61, Andalucía con 21,01, C. Valenciana con 26,36, Baleares con 27,84 y Asturias con 34,90 casos por cada cien mil habitantes.

Contagiados en España por 100.000 habitantes en catorce días
Contagiados en España por 100.000 habitantes en catorce díasAntonio Cruz

En cualquier caso el Gobierno intentará alargar el estado de alarma todo lo posible con el objeto de contender la contestación social a la crisis económica y a la intervención europea en nuestras cuentas. La independencia de muchos medios de comunicación es ahora más cuestionable que en otras crisis recientes. Gracias a todos estos factores la erosión electoral del Gobierno es todavía relativamente reducida. Pero en semanas todo cambiará al incrementarse el paro a niveles de la herencia dejada por Zapatero. Entonces no valdrá ni la falsificación de la imagen ni la manipulación de la comunicación, ni la represión que facilita el estado de alarma. Estamos en la antesala de un cambio de ciclo político, que ni el estado de excepción ni de sitio parará.

Los españoles hemos aprendido mucho de esta situación, de la falta que nos hace una administración más centralizada y profesionalizada. Con técnicos de carrera hasta el grado de Director General o incluso Secretario General en los ministerios, y su equivalente en las autonomías, si es que tras el Covid-19 y la crisis económica que se nos viene encima, continúan las autonomías en pie. Si se mantienen no será con la monstruosa estructura burocrática actual. No hará falta la declaración de estados excepcionales, como el de alarma, para que el mando único recaiga permanentemente en el Gobierno central.

En esta crisis sanitaria hemos visto cómo cada autonomía ha actuado por su cuenta, especialmente en la adquisición de material; sin embargo, en una economía a escala planetaria, solo la agrupación de compras a nivel estatal es eficiente. Somos el país del mundo con más personal sanitario infectado por carecer de los medios desde un principio. Desde el pasado día 26 de marzo somos el país europeo con mayor tasa de infectados entre su población por cien mil habitantes. Desde el pasado día 2 de abril somos el país de Europa con mayor tasa de fallecimientos por cien habitantes. Entre los países grandes de la UE somos el único que esperó que la tasa de contagio diario alcanzará el 47,8% para tomar medidas de confinamiento.

La consciencia del caos hizo tomar medidas sobre la marcha para intentar mitigar el desastre sanitario. A diferencia de Italia, nuestro espejo en todo este calvario, se nos ha ocultado el número de personas que habían ingresadas en UCI al acabar cada día. Los datos oficiales nos hablan en su lugar del número de personas que han requerido su ingreso en UCI desde el pasado 31 de enero. No se nos informa del número de personas que al finalizar la jornada están hospitalizadas en planta. En su lugar se indica el número total que ha pasado desde el inicio de la pandemia por un hospital. No se informa de la cantidad de enfermos de coronavirus que se encuentran aislados en sus casas por no requerir ingreso, ni en hospital ni tampoco en UCI. Pero en Italia todas las tardes el Gobierno informa de estas tres situaciones que aquí se nos esconden.

Además tenemos la polémica del número de fallecimientos reales, se van conociendo datos de funerarias y cementerios que son muy superiores a los que el Gobierno nos facilita. Es posible que ya no esté este Ejecutivo cuando los registros civiles faciliten los datos de fallecidos, especialmente de los meses de marzo y abril, y también de mayo y junio. En Cataluña, la Generalidad considera que son prácticamente el doble de lo que se informa.

Otra anomalía es el nuevo criterio de recuento de casos de contagio, las estadísticas gubernamentales ofrecían el dato de que 213.024 se habían contagiado hasta las 21:00 horas del miércoles 22 de abril. Al día siguiente, el jueves 23 de abril el número total de infectados en España bajaba a 202.990. En 24 horas había desaparecido de los registros 10.034 personas.

De este modo hemos revertido la estadística desfavorable a España desde el pasado 26 de marzo. Desde el jueves hay más casos nuevos en Italia (2.357) que en España (1.729); cuando el día anterior del reajuste España registró 4.635 casos nuevos frente a los 3.370 de Italia.

Los acontecimientos se precipitan en las últimas horas; salida de niños desde el 26 de abril, permisividad desde el 2 de mayo para paseos y práctica de deporte en la calle, etc… Esta próxima semana conoceremos si hay nueva prórroga y su alcance. El caos económico empieza a preocupar ya más que el sanitario en Moncloa. Por lo que barajan una salida escalonada parcial pero para lo antes posible. Italia ya contempla un nuevo escenario a partir del 3 de mayo, cuando finalizan las medidas extraordinarias, e incluso antes puede empezar a activarse parte de los sectores más estratégicos de su economía. Pero es que Italia ha tenido en los últimos 14 días una media de 51,2 casos por cada cien mil habitantes y aquí en España, pese a los cambios en el recuento, nos encontramos con 88,4 casos por cada cien mil habitantes.