Confirman cuántos pistachos hay que comer cada día para adelgazar

Los frutos secos son muy saludables y cuentan con grandes beneficios para la salud. De hecho, nuevas evidencias científicas confirman que el consumo regular de nueces, pistachos o almendras, entre otros, protege frente a la obesidad y la diabetes. Y es que, a pesar de que se piense lo contrario, también pueden ayudar a adelgazar.

Puestos a elegir un fruto seco ideal para perder peso, los pistachos se coronan como los más beneficiosos. En concreto, los resultados de los estudios científicos realizados en torno al pistacho como alimento para el control del peso demuestran que podría contribuir a reducirlo de forma gradual. El estudio dirigido por el doctor Cheryl Rock en la Universidad de California (San Diego) y publicada en la revista científica «Nutrients» muestra cómo añadir pistachos a la dieta puede contribuir a la pérdida de peso tanto en un plan de adelgazamiento restringido como de intervención conductual; a la vez, que pueden aportar beneficios adicionales para la salud como, por ejemplo, reducir la presión arterial. Además, recientemente, hemos sabido que tiene un gran poder antioxidante por encima de los arándanos y la remolacha; y, que es una proteína completa de origen vegetal.

Beneficios para la salud

Los amantes de los frutos secos que deseen adelgazar pueden sentirse mejor con el consumo de pistachos, como muestran los resultados de la Universidad de California; que han analizado si los pistachos americanos podrían formar parte de un programa de pérdida de peso en un estudio realizado en 100 individuos sanos, con sobrepeso y obesos. Se trata del primer estudio que examina el comportamiento de los pistachos como parte de una dieta de adelgazamiento, en un contexto real. Según el Dr. Cheryl Rock, responsable de la investigación, «este estudio se suma a la evidencia de que los pistachos americanos pueden ser un componente en una dieta de adelgazamiento, pueden aumentar la ingesta de nutrientes clave y, a su vez, promover un patrón dietético saludable».

Así, el conjunto de los participantes en el estudio recibió consejos generales sobre pérdida de peso en la dieta y comportamiento e instrucciones acerca de cómo aumentar su actividad física. La mitad de los participantes incluyeron 42,5 gramos de pistachos americanos en su dieta diaria, mientras que la otra mitad no los incluyó (grupo de control). Para el estudio, de cuatro meses de duración, los investigadores tuvieron en cuenta la salud de los participantes, la dieta y las pruebas de laboratorio para evaluar el riesgo de enfermedad cardiovascular al comienzo y al final de la investigación.

Más antioxidantes y menos dulces

Según los investigadores, ambos grupos perdieron alrededor del 5% de su peso corporal y ambos redujeron significativamente el contorno de cintura y el Índice de Masa Corporal (IMC). El contorno de cintura y el IMC son indicadores no solo de la obesidad, sino también de si se puede estar en riesgo de contraer diabetes y otras enfermedades cardíacas. Además de estas mediciones, el grupo de los pistachos presentó beneficios adicionales como una presión sanguínea sistólica y diastólica más baja, una mayor ingesta de fibra y un menor consumo de dulces respecto al grupo de control. El grupo de los pistachos, además, presentó niveles sanguíneos más elevados de los carotenoides antioxidantes de luteína, alfa y beta-caroteno y una proporción más saludable de ácidos grasos poli y monoinsaturados frente a ácidos grasos saturados.

Menos calorías y entre horas

Una ración de 28 gramos, unos 49 pistachos, equivale a 164 kilocalorías; y, en comparación con otros frutos secos como las nueces o las almendras, presenta menos calorías. También contiene grasas monoinsaturadas que reducen el colesterol en sangre. En cambio, el mismo peso en nueces equivale a 195 kcal.; a 191 kcal. en el caso de las avellanas; 176 kcal. para las almendras; y a 171 kcal. en los anacardos. Además, tomar pistachos entre horas, a media mañana o a media tarde, es una práctica altamente saludable y saciante, ideal para el control del peso ya que permite frenar el apetito y llegar a las comidas principales sin tanta hambre.