Salud

Fotografía histórica: así es cómo un tipo de cáncer de pulmón puede transformarse en otro

Los tumores pulmonares llamados adenocarcinomas pueden convertirse en un cáncer de pulmón de células pequeñas, mucho más agresivo y rápido

cancer pulmon
Captan la transformación del cáncer de pulmón en el actoDR. ERIC GARDNER, VARMUS LAB

No solo hay un tipo de cáncer de pulmón. Este término agrupa a una variedad de enfermedades que se comportan de manera diferente, aunque su origen sea pulmonar. Por lo general, se dividen en dos tipos: cáncer de pulmón de células pequeñas o microcítico y cáncer de pulmón de células no pequeñas o no microcítico.

El cáncer de pulmón no microcítico es el más frecuente entre ambos. De hecho, representa entre un 85 y un 90% de los casos. Entre ellos, el adenocarcinoma pulmonar es el más común. Por contra, el de células pequeñas (CPCP) concentra alrededor del 10-15% de todos los casos. Es mucho más agresivo, se propaga más rápidamente y tiene pocas opciones de tratamiento.

¿Por qué es necesario saber esto? Pues porque los adenocarcinomas a veces responden al tratamiento transformándose en un CPCP, volviéndose mucho más letal. Hasta ahora, este proceso era muy difícil de estudiar. Pero un equipo de investigadores de Weill Cornell Medicine ha tomado la primera "fotografía" de este problemático proceso en un modelo de ratón. Una ilustración que permite avanzar en la comprensión de cómo los genes mutados pueden desencadenar la evolución del cáncer y sugieren dianas para tratamientos más eficaces.

En la imagen principal que ilustra esta noticia, se puede ver cómo los investigadores detectaron in situ la transformación del cáncer de pulmón. La imagen de inmunofluorescencia muestra un cáncer de pulmón de células pequeñas (en púrpura-rosa) extendiéndose por los bronquiolos (verde) de un pulmón de ratón que contiene células tumorales residuales de adenocarcinoma de pulmón (azul).

Los científicos, cuyos resultados publicaron ayer en la prestigiosa revista Science, descubrieron que durante la transición de adenocarcinoma de pulmón a cáncer de pulmón microcítico, las células mutadas parecían experimentar un cambio de identidad celular a través de un estado intermedio, similar al de las células madre (aquellas con la capacidad de transformarse en cualquier otra célula), que facilitaba la transformación.

"Es muy difícil estudiar este proceso en pacientes humanos. Así que mi objetivo era descubrir el mecanismo subyacente a la transformación del adenocarcinoma de pulmón en cáncer de pulmón microcítico en un modelo de ratón", explica el Dr. Eric Gardner, investigador postdoctoral del laboratorio del Dr. Harold Varmus, Catedrático de Medicina de la Universidad Lewis Thomas y miembro del Centro Oncológico Sandra y Edward Meyer de Weill Cornell Medicine.

"Las nuevas tecnologías puede retratar acontecimientos dramáticos"

El complejo modelo de ratón tardó varios años en desarrollarse y caracterizarse, pero (por fin) ha permitido a los investigadores descifrar este difícil problema. "Es bien sabido que las células cancerosas siguen evolucionando, sobre todo para escapar a la presión de los tratamientos eficaces", afirma el Dr. Varmus.

"Este estudio muestra cómo las nuevas tecnologías (incluida la detección de características moleculares de células cancerosas individuales, combinada con el análisis informático de los datos) pueden retratar acontecimientos dramáticos y complejos en la evolución de cánceres letales, exponiendo nuevas dianas para el ataque terapéutico".

El CPCP se da con mayor frecuencia en fumadores empedernidos, pero este tipo de tumor también se desarrolla en un número significativo de pacientes con adenocarcinomas de pulmón. Sobre todo, tras ser tratados con terapias dirigidas contra una proteína denominada Receptor del Factor de Crecimiento Epidérmico (EGFR), que favorece el crecimiento tumoral.

Los nuevos tumores de tipo CPCP son resistentes a la terapia antiEGFR porque su crecimiento se ve favorecido por un nuevo impulsor del cáncer: los altos niveles de la proteína Myc. Los oncogenes, como EGFR y Myc, son formas mutadas de genes que normalmente controlan el crecimiento celular. Son conocidos por su papel en el crecimiento y la propagación del cáncer.

Sorprendentemente, este estudio demostró que los oncogenes actúan en función del contexto. Mientras que la mayoría de las células pulmonares son resistentes a convertirse en cancerosas por altos niveles de una proteína llamada Myc, las células neuroendocrinas, son muy sensibles a sus efectos oncogénicos. Por el contrario, las células epiteliales, que recubren los sacos aéreos de los pulmones y son las precursoras de los adenocarcinomas pulmonares, crecen excesivamente en respuesta a la mutación del EGFR.

"Esto demuestra que un 'oncogén' en el tipo celular equivocado ya no actúa como un oncogén", dijo el Dr. Laughney. "Por tanto, cambia fundamentalmente nuestra forma de pensar sobre los oncogenes". Los investigadores también descubrieron que el Myc oncogénico podía impulsar a una especie de "células madre intermedias" a formar tumores de tipo CPCP.

Por lo tanto, este estudio refuerza la búsqueda de terapias dirigidas contra las proteínas Myc, implicadas en muchos tipos de cáncer. Los investigadores planean ahora utilizar su nuevo modelo de ratón para explorar más a fondo la transición adenocarcinoma-CPCP, detallando, por ejemplo, cómo responde normalmente el sistema inmunitario a esta transición.