Entrevista

«Los síntomas de la insuficiencia venosa se acentúan con el calor»

"Ellas, y sobre todo las más altas, sufren más el síndrome de piernas cansadas", afirma a la sección "10 preguntas" el doctor Pablo Gallo, jefe de la Unidad de Angiología y Cirugía Vascular del Hospital Ruber Internacional, en Madrid

Dr. Pablo Gallo
Dr. Pablo GalloDAVID JARLA RAZÓN

1. ¿Cómo combatir el síndrome de las piernas cansadas en verano por el calor?

Debido al aumento de la temperatura, los síntomas de la insuficiencia venosa se acentúan en esta época. Por eso, en verano recomendamos una adecuada hidratación y evitar el consumo de bebidas que contengan azúcar o alcohol y los alimentos hipercalóricos. También hay que evitar la exposición directa del sol, mantener la hidratación cutánea, y realizar actividad física diaria. Caminar y nadar sientan muy bien. También ayuda mucho la terapia postural, que consiste en mantener las piernas elevadas durante más de 15 minutos. Si los síntomas son intensos, recomendamos venotónicos, que son fármacos muy bien tolerados y que ayudan a disminuir los síntomas.

2. ¿Qué ejercicios ayudan contra las piernas cansadas?

Evitar el sedentarismo es esencial, aconsejamos realizar actividad física y deporte a diario. Son ideales los ejercicios que optimizan el trabajo de las bombas musculares localizadas en ambas pantorrillas y en la planta de los pies, ya que generan contracción de los músculos consiguiendo impulsar la sangre hacia el corazón, debido a que las venas hacen el retorno sanguíneo en contra de la gravedad, por tanto, los ejercicios que impliquen la dorsiflexión de los pies favorecerán el retorno venoso.

3. ¿El consumo de tabaco y alcohol afecta?

Son una combinación peligrosa en lo que respecta a la salud cardiovascular, siendo más perjudiciales para el sistema circulatorio arterial. Sin embargo, las venas no se libran de recibir cierto perjuicio con su consumo. El tabaco afecta a muchos tejidos del cuerpo debido a que contiene muchas sustancias nocivas para el organismo, produciendo unos componentes llamados radicales libres que desencadenan una inflamación crónica, que por ser sutil suele pasar desapercibida y produce daños a largo plazo. Por otro lado, el consumo de alcohol favorece la retención de líquidos, siendo más sensibles a este problema las mujeres. También su efecto diurético favorece la deshidratación, pese a consumir líquidos.

4. ¿Por qué las mujeres sufren más de piernas cansadas?

Los estudios demuestran que la insuficiencia venosa crónica afecta entre dos y cinco veces más a las mujeres. Esto puede deberse a los cambios hormonales que atraviesan a lo largo de su vida, incluyendo la influencia de los cambios anatómicos y hormonales que se dan durante el embarazo. Es importante comentar que el riesgo de sufrir varices pélvicas aumenta exponencialmente si hay varios embarazos. Los tratamientos hormonales también influyen.

5. ¿Qué porcentaje de población española sufre este problema vascular?

En España, la prevalencia de la enfermedad venosa crónica alcanza el 48,5% de la población (58,5% son mujeres), según la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular.

6. ¿Se sabe la causa?

No tiene una causa en concreto, sí se conoce que se puede desarrollar al confluir varios factores de riesgo. Existe una predisposición genética. Algunos estudios muestran que el riesgo de desarrollar insuficiencia venosa es del 89% si ambos progenitores sufren la enfermedad y del 47% si solo afecta un progenitor. No obstante, el 20% puede desarrollar la enfermedad pese a que ninguno de los padres padezca la patología. Sin embargo, otros factores también se ven implicados, como la edad, el sexo femenino, factores hormonales (embarazos, tratamientos hormonales, etc.), el sedentarismo, el sobrepeso y la obesidad.

7. ¿Por qué las mujeres más altas sufren más este problema?

En general las personas altas tienden a ser más vulnerables para el desarrollo de varices, debido que a mayor altura mayor longitud de las venas de los miembros inferiores, y por ende mayor trayecto para retornar la sangre hacia el corazón. Si le sumamos la bipedestación prolongada, el trabajo venoso aumenta por efecto de la gravedad. Las mujeres por los motivos previamente mencionados son más propensas a desarrollar varices, que pueden empeorar con el calor, y si aunamos mayor estatura se suma otro componente anatómico que favorece a desarrollar esta enfermedad.

8. ¿Cuándo preocuparse?

Debe generar preocupación cuando los pacientes presenten alguna complicación de la insuficiencia venosa (ulcera venosa, sangrado de una variz o una tromboflebitis). En estos casos, se debe acudir de manera urgente a una unidad de patología vascular para un diagnóstico y tratamiento. Sin embargo, lo más indicado es la prevención, no esperar hasta generar complicaciones de la enfermedad. Lo ideal es que, ante la presencia de signos y síntomas de la insuficiencia venosa, se realice una valoración temprana, en especial los pacientes con antecedentes familiares de varices.

9. ¿Qué influye más en este síndrome: el sedentarismo o la edad?

El factor genético es muy influyente, y la interacción con otros factores favorecen al desarrollo de la enfermedad. No obstante, algunos factores influyen mas que otros, entre ellos la edad es uno de los factores más importantes: el riesgo tiende a aumentar a mayor edad, sin embargo, los niños o adolescentes también pueden presentar varices. Consecutivamente otro factor relevante es el sexo siendo mas afectadas las mujeres.

10. Por cierto, en cuanto al calzado, ¿qué viene mejor cuando uno padece este síndrome? Porque el tacón no ayuda, pero el zapato plano, tampoco, ¿no?

Habitualmente recomendamos calzado cómodo, que el tacón no exceda de los cinco centímetros y que no sea totalmente plano, ya que así se fomenta una activación adecuada de las bombas plantares y gemelares para que el apoyo al retorno venoso sea más efectivo.