2020: El año perfecto para viajar a Marte

El astronauta español Pedro Duque cree que estamos preparados para viajar al planeta. «Hay que trabajar más la parte psicológica que la técnica: el aislamiento es el principal problema», asegura.

Series de televisión, documentales, libros... la fiebre marciana ha llegado para quedarse. Y es que este año es clave para los próximos proyectos que trasladarán misiones humanas al planeta rojo. Por ello, la Asociación de Becarios de «La Caixa» invitó este jueves al astronauta de la Agencia Espacial Europea (ESA), Pedro Duque, y al portavoz de la ESA en España, Javier Ventura-Traveset, a un encuentro para entender mejor qué futuro nos espera.

En una entrevista horas antes con LA RAZÓN, Duque hizo hincapié en la importancia de «educar a las nuevas generaciones en la importancia de tener profesionales técnicos para el futuro, para que se puedan cumplir muchas de las misiones que se están diseñando». Para Duque, es especialmente importante «motivar el interés por la ciencia entre las niñas. Intento que ellas sean las que pregunten en las charlas que doy en los colegios. No podemos permitirnos perder al 50 por ciento de los genios». Sólo en España «hay unas 5.000 personas trabajando en el sector espacial», pero esa cifra debe seguir aumentando si se quieren alcanzar los objetivos de llegar al planeta rojo.

Duque tiene claro que «las misiones tripuladas a Marte van a ser una realidad, pero para ello tenemos que seguir trabajando». El astronauta español tiene claro que los dos próximos años van a ser clave: «Tenemos una ventana importante en 2020 para poder enviar una misión como ExoMars». ¿Por qué? Es una cuestión puramente técnica: «En esa fecha, por los movimientos de rotación de la Tierra y de Marte, es cuando más cerca estarán los dos planetas y, por lo tanto, podremos mandar un cohete que no necesite tanta potencia», argumenta el ingeniero. Y es que, a pesar de muchas de las reticencias que surgen en algunas ocasiones sobre la inversión que se hace en estas misiones, Duque insiste «en que no representa ni el 1 por ciento del presupuesto. Además, desde la crisis se ha producido un descenso de más del 30 por ciento en I+D+i. Pensar en enviar misiones al espacio, a explorarlo, es pensar en nuestro futuro». Y pone un ejemplo sencillo: «Es como si una familia decidiera no invertir en la universidad de su hijo porque no tiene réditos al instante». Y tiene claro que «la innovación procedente del espacio tiene repercusión en la evolución rápida de la tecnología y en que hoy tengamos satélites capaces de decirnos cómo funciona nuestro planeta».

La idea de ir al planeta rojo ya se empezó a fraguar en 1954, «mucho antes de hablar de viajar a La Luna, ya teníamos presente ir a Marte», sostiene. Tiene claro que es importante que existan figuras como la de Elon Musk, que con su empresa SpaceX ya ha demostrado que puede crear los cohetes que nos lleven a pisar suelo marciano. «Su papel es muy importante, pero no debemos olvidar que sin el apoyo de la Administración ninguna empresa privada podría involucrarse, ya que los beneficios son a largo plazo y no podría sostenerse por sí misma».

En lo que respecta a la formación de los futuros astronautas, Duque sí cree que estemos preparados para una estancia tan larga en el viaje a Marte: «Lo hemos demostrado en las misiones a la Estación Espacial Internacional, pero sin duda vamos a tener que seguir trabajando más en la parte psicológica que en la técnica. El aislamiento es el principal problema, así como que exista un buen equipo y una buena comunicación entre los que están en la nave y los que trabajan desde la Tierra».

Duque explica que en las primeras misiones a la Estación Espacial Internacional no había buen «feeling» entre «la Tierra y el espacio y se convirtió en un problema. Eso creo que ya no ocurriría porque ahora trabajamos como un único equipo». Por último, el astronauta no descarta que «en breve haya una nueva selección de astronautas. La última se hizo en 2009 y ya pasan de los 40 años».