Las incógnitas en torno a la muerte por Covid-19 del niño de 12 años de Gijón

La autopsia del niño de 12 años fallecido la semana pasada que pudiera confirmar un caso de Covid-19 tendrá un resultado “confidencial”,según informa La Voz de Asturias.

El pequeño murió la madrugada del 1 de enero en el Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA) como consecuencia de un fallo severo inflamatorio, después de haberse contagiado de coronavirus, según señalaron sus allegados.

Sólo la familia del menor tendrá acceso a los datos de la autopsia, que confirmará o no si el niño estaba infectado de Covid. El director general de Salud Pública de Asturias, Rafael Cofiño, afirma en declaraciones al diario asturiano, que la necropsia tendrá un resultado “confidencial y se traslada una información que ellos valoraran si hay comunicación o no”.

Cotiño explica que los datos sanitarios son privados y más en el caso de un menor y señala que siendo alguien tan joven se hace una noticia doblemente desgraciada pero que en términos general el coronavirus afecta con menor gravedad a los menores.

El menor ingresó el pasado martes en el Hospital de Cabueñes y, debido al súbito empeoramiento de su estado de salud, fue trasladado el miércoles al HUCA de Oviedo, permaneciendo en coma inducido en la UCI pediátrica. Pese a ello, el cuadro explosivo inflamatorio que sufría le afectó a los órganos vitales, por lo que la situación se convirtió en irreversible. Según publicó El Comercio, el menor no tenía patología previa conocida, era deportista y hasta pocos días antes practicaba el fútbol regularmente.