Por qué no es aconsejable usar alzadores para niños en el coche
La OCU alerta también de los peligros de los protectores de la hebilla del arnés, los cinturones dobles, los extensores y los sistemas de guiado del cinturón de adulto
Los elementos de seguridad vial que más preocupan a las familias son los relacionados con los niños. Sobre los primeros meses de edad, no existen dudas porque los capazos o las sillas del grupo 0 tienen un uso muy extendido. Sin embargo, las dudas surgen cuando los niños van creciendo. Cuando las sillas se les quedan pequeñas, en muchas ocasiones se decide sustituirlas por alzadores o directamente se quita el respaldo de la silla (algunas lo permiten), que hacen que los niños estén más altos y que el cinturón de seguridad les pueda proteger.
Hasta cierto punto es lógico porque las sillas más grandes abultan más, por lo que ocupan mucho más sitio en la parte posterior del vehículo, y son bastante más pesadas, por lo que su manejo se hace más complicado. Además, en el caso de tener llevar una de repuesto por si hay que llevar a algún amigo de los niños o a algún familiar, todo esto se complica más porque hay que buscar hueco en el maletero.
La normativa es clara y permite el uso de los alzadores homologados a partir de los 4 años, siempre y cuando pese más de 15 kilos, pero, ¿garantizan la protección suficiente en caso de sufrir una colisión? La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) desaconseja el uso de los alzadores porque no son seguros. Así, indican que en su lugar deben utilizarse modelos de sillas para niños más grandes, en este caso las correspondientes a los grupos 2 y 3.
Para la OCU, la razón para esta recomendación es clara. Los alzadores “no garantizan una protección suficiente al niño en caso de impacto lateral, un tipo de choque habitual en las ciudades”.
Así, la organización indica que debe adquirirse una silla a las nuevas dimensiones del menor. “Es la opción más segura y no tiene por qué resultar cara. Por ejemplo, entre las 30 sillas del grupo 2/3 (indicadas para niños de 15 a 36 kg de peso, de entre 4 y 12 años) analizadas y publicadas en la revista Compra Maestra, hay modelos con una excelente relación calidad precio que se vende desde 90 euros”.
Otro de los aspectos en los que la OCU incide es que se use la silla hasta que el niño o la niña midan 150 centímetros a pesar de que la legislación establece la altura en 135 centímetros. La altura mínima de 150 centímetros es la que se usa en otros países europeos porque con esa altura, la silla “resulta más segura que usar simplemente el cinturón del adulto”.
Finalmente, la OCU incide en otros dispositivos de seguridad como los protectores de la hebilla del arnés, los cinturones dobles, los extensores y los sistemas de guiado del cinturón de adulto. Para la organización, “Se trata de sistemas no homologados que pueden dificultar la operación de desatado del niño en caso de urgencia; de hecho, algunos son contrarios a la normativa”. Por lo que, en estos casos, piden a las autoridades que se retiren cuanto antes del mercado.
La Dirección General de Tráfico (DGT)lanzó una campaña bajo el lema “la silla que cuida”, en la que explica la normativa, los tipos de silla y un objetivo, lograr muertes 0 de niños con dispositivos de retención infantil