Vaticano

El Papa no viajará a Guadalupe para ganarse el jubileo

A pesar de la ampliación del Año Santo, Francisco descarta peregrinar al santuario extremeño y plantea como alternativa un “viaje espiritual”

Audiencia de ayer del Papa Francisco
Audiencia de ayer del Papa FranciscoVATICAN MEDIA HANDOUTEFE

Se desvanece otro gancho para lograr que Francisco se deje caer por España. El Papa ha confirmado hoy a través de una carta a los arzobispo de Toledo y de Mérida-Badajoz que no viajará a Extremadura para participar del Año Jubilar Guadalupense. Y eso que alguna esperanza había después de que la Penitenciaría Apostólica ampliara el Año Santo hasta el 10 de septiembre de 2022, es decir, el sábado siguiente a la solemnidad de la Virgen María de Guadalupe. Las limitaciones de la pandemia estaban detrás de este jubileo extendido en el que se confiaba, pudiera participar finalmente Francisco.

“Aunque no puedo acudir en persona, me uno a la peregrinación espiritual de muchos fieles que no han podido cumplir el deseo de acercarse al santuario”, expresa el Pontífice en una misiva en la que propone realizar como alternativa un camino interior “que nos lleva a ese hogar de María, que se vislumbra como casa de sanación”.

En este “viaje espiritual” que plantea el Papa argentino, propone como alforja tres actitudes: la conversión, el abandono filial y la puesta en marcha. Amén de la oración y el discernimiento de la mano de la Virgen, el Papa reclama que “el gozo de este encuentro no puede ser una evasión, sino un compromiso con la cruz que el Maestro nos propone, mostrando su carne todavía sufriente en la del hermano”.

Desde ahí, Francisco hace un llamamiento para que “la antigua talla de la Virgen de Guadalupe” sirva de “trono, para acoger y llevar a Jesús”. En este sentido, insta a todos los peregrinos a ser “mensajeros de la alegría del Evangelio”. Siguiendo con las metáforas, Francisco invita a ser “mantos que envuelven la carne sufriente de Jesús en el duro camino del desierto, sabiendo que a quien protegemos, cuidando al pobre y restituyendo así la misericordia de la que somos deudores, es el mismo en la estrella guía nuestros pasos”.

Lo cierto es que tras el confinamiento y las limitaciones de movilidad, poco a poco se va reactivando Guadalupe como destino. De hecho, en el primer semestre del año hasta 6.000 peregrinos se han dejado caer por el santuario extremeño.